Los seguidores del músico uruguayo Jorge Drexler sufrieron antes de poder disfrutar de la música de su ídolo.
Un atraso de más de hora y media precedió la actuación del ganador de un premio Óscar que por primera vez se presentaba en Costa Rica, con su gira
Malestar, chiflidos, gritos de “puerta, puerta” fueron algunas de las reacciones de la gente que esperaba fuera del Cllub 212.
El recinto, ubicado en San Joaquín de Flores (Heredia) dejó entrar a la gente a las 9:15 p. m., lo que no logró hacer olvidar el mal rato.
Algunos se toparon con la sorpresa, al ingresar, de que sus asientos ya estaban ocupados, según dijo Fabián Madrigal, de Palmares.
“Solo en este país pasan estas cosas, la gente se estaba peleando por los mejores asientos, de aquí en preferencial no puedo ver nada, se colaron varias personas”, contó.
El joven se mostró molesto con lo sucedido y aseguró que nadie les ofreció una explicación sobre el retraso, lo cual generó aún más molestia en los presentes.
Un criterio similar tuvo Jennifer García, quien viajó desde Honduras, solo para presenciar el concierto de Drexler.
“Es terrible, esperamos más de dos horas y media afuera. Es la primera anécdota que nos pasa de este tipo”, aseguró la mujer.
Su acompañante, Marcio Coello, también hondureño, agregó que además se toparon con un malestar extra ya que tampoco pudieron encontrar sus sillas y se acomodaron donde mejor encontraron.
Ambos coincidieron en que no era la impresión que querían llevarse del espectáculo y confiaron en poder disfrutar del
También resintieron que nadie les dio una explicación sobre lo sucedido, según afirmaron.
El músico nacional Esteban Monge, por su parte, se mostró más comprensivo con lo sucedido.
“Son situaciones que uno quisiera que no pasen y que uno no desea en un concierto, pero no sé cuáles son las razones”, añadió.
La producción del concierto le dijo a
El productor Miguel Cabrera le aseguró a este diario que el retraso se debió a una falla en uno de los generadores eléctricos, el cual tomó más de lo esperado para poder ser reemplazado a tiempo.
Este inconveniente atrasó la prueba de sonido, la cual comenzó a eso de las 7:30 p. m. y se extendió por más de una hora, mientras la gente afuera pedía ingresar en el Club 212, ubicado en esta comunidad herediana.
Los acordes de
El compositor empezó a improvisar versos en la canción para disculparse y explicar el mismo motivo dado por el productor sobre el generador, lo cual la gente agradeció con sus gritos.
Drexler se mostró agradecido de estar por fin en suelo tico, país que aseguró tenía muchas ganas de conocer desde hace tiempo.
Luego anunció que era el turno de
“Pura vida”, saludó Drexler a la gente y se ganó una lluvia de gritos. De hecho, el público, joven en su mayoría, se le entregó por completo desde el inicio con fuertes aplausos, gritos de su nombre y uno que otro piropo.
El cantante parecía abrumado ante tan cálida recepción.
Luego procedió a presentar a su banda compuesta por siete músicos que con sus instrumentos de metal, cuerdas y más le dieron hermosas tonalidades a sus composiciones, tanto nuevas como viejas.
Los presentes demostraron ser grande conocedores del trabajo del cantautor, ya que corearon uno a uno cada uno de sus temas, desde los más conocidos, hasta los más nuevos de su repertorio.
Dicen que las primeras impresiones son imborrables, pero a punta de su música, Drexler logró que la gente olvidara, al menos por un momento, la angustia de la incertidumbre de saber qué era lo que provocaba el retraso.
Al cierre de esta edición, el artista seguía sobre el escenario cautivando a sus entusiastas seguidores con temas como