Los Ángeles. Adele ganó esta noche los seis premios a los que aspiraba en los Grammy incluído canción del año por Rolling In the Deep y álbum del año por su producción llamada 21 .
Paul Epworth coescribió el exitoso sencillo de Adele y subió al escenario a recibir con ella uno de los premios. Además, él fue nombrado productor del año en la categoría no clásica el domingo.
El otro éxito que se anotó Adele fue al cantar por primera vez después de su cirugía de cuerdas vocales y demostrar que todavía tiene talento de sobra.
Justo detrás de la británica se colocó la banda Foo Fighters que se llevó cinco premios en las categorías de rock .
Los Grammy se pusieron en marcha mientras la Academia de la Grabación lidiaba con la tarea de rendir homenaje a una de sus grandes estrellas caídas, Whitney Houston, al tiempo que agasajaba lo mejor de la música, desde lo irreverente hasta lo conmovedor.
Fue un equilibrio delicado. El espectáculo arrancó con Bruce Springsteen, con toda una sección de cuerdas, interpretando su nueva canción We Take Care of Our Own , un tema enternecedor que hace referencia a los problemas de la nación.
Pero poco después, un sombrío LL. Cool J., el anfitrión de la velada, apareció vestido de negro y le dijo al público: “No hay cómo darle la vuelta a esto. Hemos sufrido una muerte en nuestra familia”.
Entonces guió a los presentes en una oración “para nuestra hermana caída, Whitney Houston”.
“Padre Nuestro, te agradecemos por compartir a nuestra hermana Whitney con nosotros”, dijo, mientras celebridades como Lady Gaga y Miranda Lambert inclinaban sus cabezas en oración. “Aunque ha partido demasiado pronto, permanecemos verdaderamente bendecidos de haber sido tocados por su hermoso espritu”.
De inmediato presentó un clip de una radiante Houston cantando una de sus canciones más conocidas, I Will Always Love You . LL Cool dijo después, haciendo alusión al título del tema: “Whitney, nosotros siempre te amaremos”.
En su interpretación de Runaway Baby , Bruno Mars también mencionó el deceso: “Esta noche estamos celebrando a la hermosa señorita Whitney Houston”.
Houston falleció en la vÍspera del Grammy en el hotel Beverly Hilton, donde se preparaba para asistir a una fiesta del Grammy por la noche. Previo a la muerte de una de las figuras más importantes de la música pop, los rumores del Grammy se enfocaron en si Adele sería la reina de la noche. Aunque Kanye West encabezaba la lista de nominados con siete candidaturas y Bruno Mars y los Foo Fighters empataron con Adele con seis, ella era la favorita.
Momentos antes de comenzar el show el foco seguía siendo la muerte de Houston. Un homenaje a la cantante, en la voz de Jennifer Hudson fue uno de los puntos más emotivos de la noche.
Los organizadores del Grammy hicieron lo mejor que pudieron por mantener un tono que equilibrara todas las emociones de la noche: los Foo Fighters cantaron en una carpa afuera del Staples Center, donde los premios se entregaban, y momentos antes Alicia Keys y Bonnie Raitt rindieron homenaje a Etta James, la leyenda que murió el mes pasado.
El espectáculo marcó la primera ocasión que Rihanna y Chris Brown aparecieron en la misma ceremonia desde que él la atacó hace tres años _ también en la víspera de los Grammy –llevando a ambos a retirarse del show y a Brown a recibir una condena por agresión–. El suceso casi destroza su carrera, pero en el 2011 el cantante volvió con fuerza y fue recompensado con varias nominaciones y una victoria, además de la oportunidad de actuar el domingo.
Rihanna también estaba nominada, a álbum del año. Competía con Adele (21), Mars ( Doo-Woops & Hooligans), los Foo Fighters ( Wasting Light) y Lady Gaga ( Born This Way)