La estela de Jalé Berahimi no solo queda en lo que dice y hace. En cada paso que da, la periodista y presentadora de televisión también deja rastro.
Con casi ocho años de estar en el ojo público, Jalé ha demostrado ser una figura rentable para la tevé criolla. De no ser así, Televisora de Costa Rica no la hubiera reclutado para la tercera temporada de su programa estelar del domingo, Dancing with the Stars.
Pero más que controversial, la sexi morena es una mujer picante y auténtica, rasgos de su personalidad que le han permitido empatizar con el público o no. Con Jalé, los tintes medios no existen. Se le quiere o no. Punto.
Así lo vivió durante la tarde de un lunes, mientras caminó por unos metros por la avenida central de San José para llegar al Mercado Central, donde se reuniría con un equipo de Viva.
En pocos minutos, Jalé cosechó piropos, firmó autógrafos, se tomó selfis y hasta provocó algunas discusiones de parejas, todo por las miradas que atrajo mientras recorría los pasillos del popular mercado capitalino, en algunos de los cuales posó para las fotografías que acompañan este trabajo.
Luego Berahimi, de 31 años, concedió una entrevista, en la que repasó su carrera y las polémicas a las que ha debido enfrentarse. Aquí, parte de la charla:
Sus acciones siempre están en el blanco de las críticas... ¿Cómo batalla contra eso?
Uno siempre aprende de los errores. Todo el mundo ha metido las de andar alguna vez. Lo que pasa es que, al estar en el ojo público, hay que tener mucho más cuidado. Ahora me cuido más a la hora de escribir o de decir, pero sin quitar mi esencia porque tampoco me voy a volver una seria. Jalé no es así.
Mucho de su humor es negro... ¿de quién lo heredó?
Vieras que de nadie, simplemente esa soy yo. Sí, es un humor negro pero sin afán de ofender. Es un humor que siempre lo utilizo para sacarle una sonrisa a alguien, contar un chiste, los famosos chistes rojos… Vos sabés. Esa es Jalé: una mujer picante, auténtica, que a veces no tiene filtro, y eso a mucha gente le choca. Pero Jalé tiene buen corazón, no es hipócrita y no necesita maquillar ni lo que dice ni lo que hace para agradar a las personas.
¿Por qué cree que la gente la ataca tanto?
Es que la gente está acostumbrada a que todo sea color de rosa y a que las cosas se hagan como ellos quieren, pero cuando llega alguien con una personalidad explosiva les choca. Hay otra gente que simple y sencillamente se siente identificada.
¿Qué toma de las críticas que se gestan alrededor suyo?
Me he dado cuenta que es muy difícil quedarle bien a todo el mundo y que vale más la pena ser uno mismo, transparente y sin máscaras, que actuar para caerle bien a todos los demás. Es ahí donde me doy cuenta que la gente que me quiere, me quiere tal cual soy y no porque ande aparentando. Admito que muchos golpes que me he llevado me han ayudado a crecer, madurar y sobretodo a ver la vida de una manera diferente, porque con mi manera de ser también tengo corazón y hay muchas cosas que me hieren.
¿Como cuáles?
Que me insulten o me falten el respeto. Una cosa es que no le caiga bien a algunas personas y otra muy distinta es que utilicen adjetivos en contra mía sin siquiera conocerme. Pero de ahí aprendí a tomar las cosas de quien vengan. También he escuchado muchos consejos.
Dice que durante el tiempo que lleva en el ojo público se ha llevado muchos golpes... ¿Cuáles le han dolido más?
¡Ay, vieras que todos! Es complicado ponerse a pensar cuál es el peor, pero es simplemente dejarlos ir y que no te afecten. Nombrarlos no vale la pena.
¿El altercado con Jair Cruz ha sido el momento más incómodo de su carrera?
Hay muchos más. Lo de Jair Cruz fue una cosa del oficio. Mucha gente lo tomó muy mal, otra no. Ya eso pasó y no es nada de lo que pueda decir, '¡mirá esto me afectó!'. Soy de las que creen que cuando caemos hay que levantarnos, seguir adelante y decir, aquí no ha pasado nada.
¿Cuál es la controversia más grande que ha protagonizado?
No hay escándalos, simplemente hay enseñanzas.
También es blanco de burlas. ¿Alguna le ha tocado la fibra?
No, en lo absoluto. Me hace gracia porque la gente hace mucha mofa de mi nariz, pero si hubiera querido desde hace años me la hubiera operado, pero me siento orgullosa de esa parte de mi cuerpo, de mis raíces. Es la nariz que me dejó de herencia don Mahmood (de origen iraní), mi padre. Simplemente lo que hago es bañarme en aceite y listo.
Una broma en Snapchat motivó una protesta que tiñó su debut en canal 7. ¿Qué pasó por su mente ese día?
En ese momento no sé si sentía o no. Me di cuenta que había una protesta fuera del canal porque me lo contaron. Simplemente dije: 'Que sea lo que Dios quiera'. No te voy a mentir, eso me afectó mucho con mi primera presentación en Dancing with the Stars , pero me agarré de la mano de Dios y le pedí que me protegiera y ayudara. Dios sabe que soy una buena persona y que lo que hice no tuvo ninguna mala intención.
¿Cómo llega a canal 7?
Mi ingreso a Teletica no tuvo absolutamente nada que ver con mi salida de Repretel. Yo ya había cumplido un ciclo en Intrusos, que fue mi casa y mi universidad por casi ocho años. Cuando yo renuncié a Repretel en canal 7 hablaron conmigo y yo acepté la propuesta.
Pero usted salió de Repretel para dedicarle tiempo a su empresa de trajes de baño...
Y lo he hecho, pero si hay algún proyecto bonito que vaya a disfrutar, en el que sea yo misma y que me motive a levantarme día con día lo tomaré en cuenta. Disfruto la televisión al máximo, me encanta y si se da la oportunidad de continuar en este medio lo analizaré.
¿A qué aspira en canal 7?
Estoy tan feliz por esta nueva etapa que estoy viviendo que lo que venga y lo que Diosito me tenga destinado lo voy a aceptar felizmente. Ahorita no tengo idea de qué me va a deparar Diosito, pero sea lo que sea estoy preparada.
Casi tres meses después de su salida de Repretel cerró Intrusos ¿qué mató al programa?
El cambio de horario. Intrusos terminó en un horario en el que la mayoría de los ticos estamos en las presas. Considero que mi salida no afectó porque nadie es indispensable en un trabajo mas todos somos necesarios.
¿Le dolió el cierre?
El público hoy nos identifica (a ella y demás exintegrantes) gracias a Intrusos. Lo que me dolió fue que muchos de mis compañeros se quedaran sin trabajo. Dios sabe porqué hace las cosas.
CRÉDITOS.Fotografías: Rafael Murillo. Locación: MercadoCentral de San José. Vestuario y calzado: Bogaspaccio.Maquillaje: Alejandro Ramírez.