El carro de la familia de la actriz Tatiana Chaves se convierte a diario en una especie de casa rodante. Ella, su esposo Wilson Ulate y su pequeño hijo, Felipe, de dos años y medio, se enrumban todos los días a descubrir las sorpresas de una vida de padres teatreros.
En medio de vestuarios, luces y las tablas de los teatros, Tatiana vive una vida en pura carrera para compartir tiempo de calidad con su pequeño.
“Es una combinación bastante fuerte, pero creo que es una realización muy hermosa. El trabajo artístico es muy demandante, pero tiene su recompensa porque en el proceso hay cosas que uno asume más en familia, lo cual no cualquier trabajo lo permite”, aseguró la joven mamá.
Tatiana asegura que con su esposo Wilson Muñoz hacen un trabajo en equipo y esta organización los ha llevado a buen puerto.
“Viajamos mucho y Felipe se comporta como si no pasara nada; él siempre es el que disfruta más de los paseos”, explicó Tatiana.
De hecho, durante el tiempo entre ensayos, presentaciones y clases que vive Tatiana, a Felipe le salen muchos niñeros. El pequeño se convierte en el centro de atención en cualquier parte y eso es una gran ayuda para la madre.
“Hemos logrado con el pasar del tiempo encontrar una dinámica que, vista desde afuera, puede parecer caótica y desordenada, pero nos acoplamos bien”, comentó la artista.
Entre las anécdotas de esta madre y actriz, está que ella defiende a capa y espada la lactancia materna y a Felipe le encanta la idea. “La parte más complicada es establecer una rutina de horarios de descanso, juegos y comidas para Felipe. Como él todavía toma leche materna, tengo que parar en ensayos para darle”, dijo.
Los horarios de trabajo son otra de las situaciones complicadas. Tatiana hace giras y presentaciones durante la noche; muchas veces su familia se convierte en el brazo de apoyo y la ayudan a encargarse del niño.
“Para mí ser mamá es la mejor escuela de paciencia, de estrategia, de creatividad, de amor, de desprendimiento y de libertad. Esta labor me ha enseñado a ir superando paso a paso muchos de mis miedos en la crianza de Felipe y él se encarga de darme las mejores lecciones de vida que pueda recibir”, agregó.