Leslie Nielsen FILE - In this file photo taken Dec. 12, 2003, actor Leslie Nielsen walks off stage after receiving the Order of Canada from Governor General Adrienne Clarkson during a ceremony in Ottawa. The Canadian-born Nielsen, 84, has died in a Florida hospital on Sunday, Nov. 28, 2010, according to his agent John S. Kelly. (AP Photo/The Canadian Press, Jonathan Hayward, File) (JONATHAN HAYWARD)
Ni legendarias estrellas del cine, de la televisión, de la música y de la moda se salvaron este año de las garras de la muerte. El género masculino fue el más golpeado con la partida de grandes artistas.
Sin haberse repuesto de las grandes pérdidas del 2009 –como la muerte de Michael Jackson–, el mundo del espectáculo recibió el 2010 con una bomba que, aunque predecible, no dejó de estremecer a la música hispanoamericana: la muerte de
Un mes después, la noticia de la muerte del diseñador Alexander McQueen sacudió a la industria de la moda. El cine también lloró a personalidades como el afamado galán de los años 50: Tony Curtis y, más recientemente, a Leslie Nielsen, rey de la comedia absurda.
El prolífico compositor Roberto Cantoral;
A tres días de que se termine el 2010,
El cantautor, cuyo verdadero nombre era Roberto Sánchez, murió producto de un cuadro de
Su historial médico estuvo plagado de altibajos: leves mejorías y estrepitosas recaídas fueron la constante desde noviembre del 2009 –mes en que se sometió a una doble operación de pulmones y corazón–, hasta el día de su muerte.
Fotos, lágrimas, flores e interminables cánticos fueron las formas en que sus seguidores le dijeron adiós al popular
El cantautor argentino fue despedido con grandes honores. Fue velado en el Salón de los Pasos Perdidos, del Congreso argentino, uno de los máximos homenajes con que Argentina le dice adiós a sus más queridos hijos.
Su casa, ubicada en el barrio de Banfield, en los suburbios de Argentina, y el hospital de Mendoza, donde falleció, fueron otros de los puntos donde las “nenas” –como él llamaba a sus fans– se congregaron a llorarlo.
El 16 de mayo la música también fue golpeada con otra importante pérdida. Ese día se desvaneció la llama del legendario roquero Ronnie James Dio, a quien un cáncer de estómago le ganó la batalla que había comenzando en el 2009.
“Después de que mate al dragón (el cáncer) Ronnie volverá a los escenarios, a los que él pertenece y hará lo que más le gusta: actuar para sus fans”, había dicho en el 2009, Wendy Dio, su esposay mánager.
Aunque los Dios estaban convencidos de la recuperación, esta nunca llegó. Pero el roquero nunca aflojó: al tiempo que se sometía a sesiones de quimioterapia y era intervenido, él organizaba su
Hoy, James Dio es recordado como el autor de la popular señal de los “cuernos” del
Dos meses después de la partida de Dio, la muerte tocó, el 7 de agosto, a la puerta del compositor mexicano Roberto Cantoral, autor de más de 100 canciones que sirvieron para edificar la carrera de grandes artistas.
Cantoral, padre de la actriz Itatí Cantoral, murió a los 75 años, en Toluca, México, producto de un infarto, que venía precedido de un largo historial de enfermedades. Sin embargo, la estocada final se la dio un cuadro de neumonía.
Desde el 2008, el compositor de temas como
Cantoral partió también entre grandes honores. Sus restos fueron llevados al Palacio de Bellas Artes de la ciudad de México, el máximo privilegio con el que ese país honra a sus más destacados artistas.
Artistas y compositores como el maestro y su amigo de toda la vida Armando Manzanero, Alfredo Jiménez (hijo), Jaime Almeida, Manolo Marroquín y Fabiola Campomanes fueron algunas de las personalidades que asistieron a despedir al autor de
Pasarelas como la de la Semana de la Moda de Nueva York y conciertos como los de Lady Gaga –gran seguidora del modisto– fueron los escenarios en los que se despidió a quien en 1996 sucediera a John Galliano como diseñador principal de la prestigiosa casa de modas Givenchy.
McQueen falleció a los 40 años, en Londres. Quien en vida fuera un genio de la moda, murió tras haberse suicidado.
Una fuerte depresión que le ocasionó la muerte de su madre sería la que le cobró la vida al diseñador, el 11 de febrero.
Con más de 100 películas a cuestas, el actor estadounidense murió el 29 de setiembre, producto de un paro cardiaco. Él falleció en su casa, cerca de Las Vegas.
El actor, cuyo verdadero nombre era Bernard Schwart, padecía una obstrucción pulmonar crónica y en julio había sido hospitalizado, tras un fuerte ataque de asma.
El icónico artista partió de este mundo sin ver coronado uno de su más grandes sueños: recibir un Óscar, del cual él nunca tuvo reparos en decir que ese era un galardón que se merecía.
Empero, el intérprete de
Su complicidad con la también mítica actriz Marilyn Monroe lo terminaron de lanzar al estrellato. Junto a la despampanante rubia, compartió protagónico en una de las comedias más aclamadas del cine clásico:
La de Curtis no fue la única muerte que enlutó al sétimo arte, Dennis Hopper y Leslie Nielsen también fallecieron este año.
La de Nielsen cerró el ciclo de muertes del año. Conocido como uno de los reyes de la comedia absurda, el actor murió el 28 de noviembre, por complicaciones derivadas de una neumonía.
El canadiense falleció a los 84 años, en Miami. Hasta el día de su muerte, el artista de pelo canoso se mantenía activo en la industria del cine, no solo como actor sino también como productor.
Al momento de su muerte, él prestaba su voz en
Famoso por su personaje del teniente Frank Drebin, la salud de Nielsen cayó de forma estrepitosa dos días antes de morir.
En el caso de Hopper, su deceso se dio el 29 de mayo, luego de que el cáncer de próstata le ganara la vida al cineasta de 74 años, director de filmes como
Hopper nunca permitió que el cáncer lo redujera a una cama. Días antes de su muerte, asistió a la ceremonia en la que se le otorgó una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood.