Tokio, EFE El documental ganador de un Óscar The Cove , que explora la matanza de delfines en un pueblo de Japón, se estrenó el sábado en varias salas del país asiático, en medio de una encendida polémica y las protestas de grupos que lo tachan de anti-japonés.
Grabado en buena parte con cámaras ocultas en el pueblo de Taiji (costa este de Japón) , el filme llegó a las salas niponas con una semana de retraso a causa de las movilizaciones de nacionalistas radicales que se oponían a su proyección.
Las protestas y una agresiva campaña contra la película hicieron que los pocos cines que habían anunciado su estreno para el día 26 de junio optaran por cancelarlo, lo cual provocó una ola de críticas y atizó el debate sobre la libertad de expresión en Japón.
Finalmente, varias salas de las ciudades de Tokio, Yokohama, Osaka, Kioto, Sendai y Hachinone se decidieron a exhibirlo desde el sábado para que “la gente pueda expresar su acuerdo o desacuerdo, después de haberlo visto” , indicó la distribuidora de la película, Unplugged.
Agentes de la policía patrullaron alrededor de algunas de las salas donde se proyectó el filme para evitar manifestaciones, prohibidas por los tribunales después de que los cines de Yokohama y Tokio presentaran un recurso en contra de las movilizaciones.