Conversar con un productor nominado al mayor premio de cine es un sueño de muchos y un privilegio de pocos. Sentarse a discutir con dos de ellos sobre la industria y el desarrollo del cine en Costa Rica es un hecho extraordinario que ocurre una vez en la vida, gracias al FIA.
Jonathan Sanger , la mente detrás de producciones como El hombre elefante , Vanilla Sky y Paraiso Travel, y su colega Alex Rose, quien tiene en su currículo éxitos de la crítica como Norma Rae, compartieron ayer con el público y los cinéfilos sus ideas sobre las historias, remakes y adaptaciones en el cine, durante las clases maestras organizadas por Cinescopia.
Dos apasionados por el arte de contar historias –incluso las anécdotas propias– compartieron con generosidad consejos para la naciente industria del cine tico.
¿Cuál es su primer recuerdo del cine?
Rose: Mis padres me llevaron a ver una película de Disney cuando era niña. Se llamaba Song of the South y me marcó mucho. Fue una experiencia maravillosa ir al cine y ver a estos personajes viejos y maravillosos.
Sanger: Iba con mis padres todos los sábados al cine desde que era muy pequeño. Vivía en Brooklyn y habían muchos cines. Recuerdo haber visto Brigadoon, con Gene Kelly. Estaba fascinado por las películas desde muy temprana edad.
Rose: Para mí las películas eran también una oportunidad de ver mujeres haciendo cosas interesantes. Recuerdo haber visto Annie Oakley. Eso cinta me enseñó que “puedo hacer cualquier cosa mejor que tú”. Eso se quedó conmigo y juré que podría disparar tan bien como un hombre, haría cualquier cosa por que ella estaba ahí haciéndolo.
¿Qué de la magia del cine los hizo dedicar sus vidas a crear historias para la gente?
Sanger: Yo trabajé en el teatro cuando estaba en la universidad; actúe en muchas obras y empecé a dirigirlas. Recuerdo que siempre quedaba disgustado al final de cada presentación porque solo las personas que la vieran lo recordarían: había terminado. Eso fue realmente lo que me hizo pensar en las películas en los términos de registro, el trabajo se graba y durará...
Rose: Yo pensé que estaba destinada a una carrera en el Servicio Exterior. Me había graduado de ciencias políticas y estudiaba francés... Entonces empecé sentirme políticamente a disgusto con la guerra de Vietnam... Creo que fue el asesinato de John F. Kennedy lo que me hizo decidir que no podía hacer eso. Salí del país y me fui a Francia a vivir, donde trabajé en la Cinemateca Francesa.
“Siempre me gustaron las historias desde niña, leía todo el tiempo, muchos libros. Siempre estuve interesada en cuentos, personajes, mitos. Cuando llegué a Francia empecé a traducir para una compañía de películas y a servir de intérprete en sus reuniones. Y me di cuenta que eso era contar historias”.
Ustedes mencionaban que las diferentes cintas extranjeras que vieron en su juventud los moldearon. ¿Qué piensan de las críticas sobre la ligereza en la industria de Hollywood?
Rose: Creo que son críticas válidas. Todos tienen una tolerancia diferente para lo que quieren hacer un viernes en la noche. Entre más duro trabaje alguien, algunas veces su tolerancia para un tema más profundo no está ahí porque están cansados. Entiendo eso.
Nunca critico las películas más ligeras, los estudios se han dado cuenta de que más personas quieren ver cintas de este tipo... Ellos tiene que hacer dinero, son estructuras gigantescas, y también se han dado cuenta que les gusta ver historias con las que estén familiarizados. Así que forman una marca como Piratas del Caribe o Superman. La gente dice ‘me encanta eso’ y van a verlo porque tienen miedo de poner su dinero en algo de lo que no están seguros.
”No culpo a los estudios por perseguir el dinero, porque tienen que sobrevivir”.
Sanger: Los dramas son los proyectos más difíciles de hacer en un estudio y ha sido así por un buen rato. Una película como Norma Rae, podría no hacerse en un estudio hoy, pero se produciría independientemente. Hay otro mercado ahí afuera y los que estamos interesados en hacer ese tipo de historias podemos hacerlo. La pasión por una historia es lo más importante, en un filme, la historia lo es todo.
Han estado varias veces en la entrega de los Óscar, ¿resulta sencillo aplaudir para alguien que les ha arrebatado la estatuilla?
Sanger: Te contaré una anécdota graciosa. La primera película que hice, El hombre elefante, estuvo nominada a ocho premios Óscar y no ganamos ninguno. Sin embargo, yo estaba tan emocionado de estar ahí. Claro que es decepcionante cuando no llaman tu nombre, pero la compañía en la que estábamos era directores como Martin Scorsese y Roman Polanski.
¿Han visto alguna película costarricense?
Sanger: No todavía; pero definitivamente lo haré.
La industria del cine costarricense está en una etapa naciente, hay muchos cineastas jóvenes intentando hacer cosas. ¿Cuál sería su consejo para ellos?
Rose: El Gobierno y la Cámara de Comercio de Costa Rica necesitan formar una comisión de cine. Cuando otros países quieran hacer una cinta aquí, pueden llamar a esa oficina, pueden hablar con alguien y decirles quiénes son las personas que trabajan en cine en el país. Necesitan hacer un catálogo de las habilidades de cualquier persona que haya trabajado en un filme
”Después necesitan desarrollar una oficina dentro de esta comisión donde todas las locaciones estén en un catálogo, con fotos, y puedan enviarse por correo electrónico a las personas. Así, cuando los equipos vengan a Costa Rica y digan quiero grabar en una playa, puedan ver todas las playas.
”Hay que convertir a Costa Rica en un país amigable con el cine. Así cuando las producciones vengan, sus ciudadanos pueden trabajar y adquirir experiencia”.
Sanger: También es importante que los cineastas confíen en sus propias visiones y no intenten imitar. Hay algo único sobre los cineastas indígenas en cada sociedad. (Ayer) hablaba con un director que ama a Costa Rica y de verdad quiere darle una voz al país que no es conocida en todo el mundo.
Como productores, ¿considerarían venir a trabajar a Costa Rica?
Sanger: Sé que hay filmes que están planeando... Yo mismo estoy trabajando en un filme que tiene una secuencia que ocurre en Costa Rica, por coincidencia así es. Me gustaría poder contratar la mayor cantidad posible de locales cuando la hagamos y no tengo forma de saber quiénes son los indicados.
”Si hubiera una comisión de cine, la gente entregaría sus currículos y me permitiría empezar a conocer personas. Así es como ha funcionado con Canadá o algunos estados que ahora dan beneficios para películas. Ellos empiezan atrayendo cintas por la belleza de sus locaciones, pero desarrollan toda una infraestructura alrededor”.
En la cinta que Will Smith rodó en el país muchos de los técnicos especializados eran extranjeros...
Rose: Sí, lo sé. Es una locura. Entiendo que ustedes tienen la capacidad de apoyar solo una película a la vez. Ustedes pueden atender solo una en este momento, pero pueden hacer dos, tres o cuatro, tan pronto como puedan entrenar personas para trabajar en las diferentes cintas que vengan a Costa Rica.
”Otra cosa que el país debe desarrollar son estudios de sonido porque llueve mucho aquí... Se necesita un esfuerzo concertado de los gobiernos, la Cámara de Comercio, los empresarios. Se necesita de personas que estén dispuestas a invertir, hay que invertir en una industria que es todavía un infante. Todo se pagará con creces después”.
¿Puede comentarnos más sobre la película y el rol de Costa Rica?
Sanger: Estoy desarrollando un filme y tiene una secuencia que ocurre en una área de canopy de Costa Rica, fue escrita así. Siempre hablamos de grabar ese segmento de la cinta aquí. Espero que podamos, pero en este momento no tengo idea de a quién puedo contratar localmente, porque no hay forma de hacerlo.
”La buena noticia es, por ejemplo, si traigo a un camarógrafo de clase mundial, va a necesitar asistentes, cargadores de filme costarricenses... Los van a entrenar y van a tener la oportunidad de trabajar con uno de los mejores talentos del mundo. Es bueno para la industria local y para nosotros”.