08marzo2012 Archivo Nacional. Un vistazo al proceso de restauracin de los cuadernos del historiador Jos Mara Figueroa, los cuales contienen caricaturas y stiras que criticaban el sistema poltico y religioso de la poca. /Juliana Barquero (Juliana Barquero A.)
De jovencillos, estos cinco hermanos eran irreverentes, desbocados y “valeverguistas” a más no poder.
Hoy, los
Este personaje multifacético dedicó su vida a desnudar sin reparo las corruptelas de políticos, religiosos, hombres de negocios y hasta de las señoritas de sociedad a través de dibujos, ilustraciones, textos y mapas que recopiló en su obra cumbre el
Los cinco cuadernos son como hermanos menores del
Actualmente, cuatro de ellos están bajo custodia del Archivo Nacional : el cuaderno verde, el rojo, el de los animales y el del abecedario. El destino del quinto – el cuaderno violeta– es un misterio.
“El estado general de conservación de los documentos es muy bueno, alcanza el 75%”, declaró Carlos Pacheco, restaurador del Departamento de Conservación del Archivo Nacional, responsable del proceso. “Los principales daños que presentan son suciedad y manchas, debido al paso del tiempo; una inadecuada encuadernación; rasgaduras o bien faltantes en algunos folios”, explicó Pacheco.
Al parecer, los “viejitos” se mantienen en buena forma pues durante décadas estuvieron resguardados en un sitio apto para ello.
“No sufrieron los efectos dañinos de la humedad. Pero, además, fueron confeccionados con materiales de excelente calidad y muy resistentes: papel de pasta mecánica y tintas a base de pigmentos naturales”, dijo el restaurador.
Ya bañaditos y humectados, el siguiente paso es el secado. “Se acomodan los folios en una parrilla de acero inoxidable y se dejan orear al natural. Pueden tardar entre 4 y 8 horas para secarse”.
Con estas dos fases, aclaró el experto, se cubre 50% del tratamiento de sanación para los documentos.
Luego el “cirujano” debe analizar a cada paciente individualmente para definir cuál procedimiento reconstructivo debe aplicarle.
En algunos folios hay rasgaduras o pequeños agujeros, algo así como raspones o cicatrices.
“Para reparar estos daños se colocan trozos de papel tipo
Para heridas más graves o amputaciones, se requieren injertos. La “piel” dañada se repone con papel japonés, que es similar en color y grosor al original. “Se coloca el papel japonés sobre el documento para copiar con lápiz el daño. En un cartón aparte se hace el corte del trozo que va a reemplazar el faltante. Luego se aplica pegamento en el borde del folio y se adhiere el injerto”, detalló. Por último, viene la costura a mano con hilo de nailon y la encuadernación, también manual, con una cubierta sencilla, pero gruesa. Actualmente, solo el cuaderno verde está restaurado y los demás estarán listos en mayo.