Los músicos de La Cuneta Son Machín se describen a sí mismos como "el nuevo sabor de la cumbia nicaragüense".
Con cada presentación que ofrecen en nuestro país lo reafirman y enloquecen a su fiel público que se multiplica en nuestro país.
La noche de este domingo, la Plaza de la Democracia explotó al ritmo de la música bailable creada por los jóvenes oriundos de Managua y el primer fin de semana del Festival Internacional de las Artes (FIA) cerró con broche de oro.
La banda, fundada en el 2009, vino a presentar su más reciente álbum: Cañambuco , lanzado de forma gratuita en mayo de este año.
Las piezas Mondongo , Cañambuco y El Chikungunya calentaron el ambiente de la fría noche en la capital.
A la hora de interpretar algunos de sus más conocidos temas como Cangrejito playero, El chicle y La caponera , la euforia en el parque josefino era absoluta.
Los pasos del vocalista Carlos "Frijol" Guillén contagiaron a cientos de personas que se animaron a bailar y corear las letras de la banda.
"Ya es como la tercera vez que venimos al FIA y cada vez que nos vamos, nos vamos muy contentos", dijo Guillén.
"Aquí siempre nos han recibido 'deacachimba'", agregó el bajista Augusto Mejía, al resaltar el apoyo del público tico. Además, agradeció la presencia de un gran público nicaragüense que se unió a la fiesta, ondeando sus banderas. “Les agradecemos que ustedes los costarricenses estén intentando hacer un cambio. Nicaragua es un país hermoso, Costa Rica es un país hermoso. Qué bueno que estén aquí”.
Nueva propuesta. El disco Cañambuco da continuidad al proceso de experimentación sonora que iniciaron con su producción anterior, Mongongo , nominada a los Grammy Latinos (2016), en la categoría de Mejor álbum rock, urbano o alternativo.
La canción Cañambuco , segunda pieza que tocaron y que da nombre al disco, es una invitación a no usar ropa interior. En Nicaragua, la frase "andar cañambuco" significa no vestir prendas debajo de la ropa.
"Queremos liberarnos de los prejuicios, los temores y los falsos moralismos que muchas veces la cultura nos impone a la fuerza, separándonos y dividiéndonos", dijeron los artistas al diario La Prensa de Nicaragua. "Por eso el subtítulo del disco es 'El Nuevo Movimiento de Liberación Corporal', porque creemos que la música puede 'desnudarnos' de todos los prejuicios que separan a las personas".
La banda, conformada por los músicos Carlos Luis Mejía (marimba y timbales), Carlos "Frijol" Guillén (voz líder), Ernesto "Matute" López (batería, timbales y coros), Omar Suazo (guitarras), César Rodríguez (teclados), Augusto Mejía (bajo y coros) y Erick Reyes (técnico de audio) repasó algunos de sus temas más conocidos, incluidos en sus anteriores producciones, Amor fritanguero (2013) y Mondongo (2015).
La banda cerró su concierto de casi hora y media con algunas de sus canciones más solicitadas, como Amor fritanguero, Catalina y Entre ritmos y palmeras. Su presentación terminó a las 10:40 p. m. con su efusiva versión de la pieza La del moño colorado.
Tras esta participación en San José, la agrupación nicaragüense se subirá a un escenario en Colonia, Alemania, el próximo martes.