Pese a que Alto Telire, en Talamanca es una de las zonas más inaccesibles de Costa Rica, unas 104 familias indígenas cambian sus ranchos en mal estado por nuevas casas, mediante el bono aprobado por el Banco Hipotecario de la Vivienda (Banhvi).
Con los nuevos 39 casos recién aprobados por el Banhvi, serán 104 las familias de Alto Telire que cambian sus viejos ranchos de bambú, en condiciones inhabitables, por una vivienda digna, en lo que va del año. El total de la inversión en este territorio ha sido de ¢1.315 millones.
La madera que se utiliza para la construcción de las viviendas es extraída de las montañas de Talamanca, conlos permisos respectivos. Al igual que con los casos anteriores, la empresa Construcciones Técnicas Tres H del Caribe.
La Fundación Costa Rica-Canadá, como entidad autorizada, es la que se encarga de supervisar y garantizar la calidad constructiva de las obras, con el propósito de que las familias reciban una casa de calidad y que se ajuste a las necesidades de las comunidades.
"En el gobierno anterior hubo gente de Talamanca que tuvo vivienda, pero qu nunca le consultaron las necesidades y su cultura. Ahora, sí se está tomando en cuenta lo que realmente ocupa el indígena", expresó el líder indígena Óscar Almengor.
De los nuevos casos aprobados, unos 20 serán de 52 metros cuadrados (tres dormitorios) destinadas a núcleos familiares compuestos por más de cinco miembros. Las restantes 19 casas serán de 44.66 m2 (dos dormitorios) destinadas a familias compuestas por menos de cinco miembros.
Ambos modelos serán construidos sobre pilotes e incluyen un balcón y la cocina es independiente del resto de la casa, según tradiciones ancestrales de la etnia cabecar.
Estas familias viven de labores agrícolas de subsistencia como el cultivo de maíz, frijoles, yuca, plátanos y ñame.