Leer etiquetas, verificar la instalación eléctrica de la casa y no endeudarse, describen la ruta que debería transitar quien busca adquirir electrodomésticos y equipo electrónico. Algunos compradores, no obstante, se alejan de dicho camino.
Aún es frecuente hallar personas obviando estos consejos simples, cuya omisión podría dañar los aparatos o invalidar el reclamo de una garantía, creen especialistas consultados.
“El empaque del fabricante lo dice todo. Allí se localizan los datos clave que casi nadie lee. Parece mentira, pero la gente no se fija, se va al precio y la marca”, afirma Viviana Arguedas, del área de Promoción y Asesoría de la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL).
Por ejemplo, citó que un dato de interés en los empaques son aquellos que garantizan eficiencia energética en el artefacto, como Energy Star.
Además, recordó que todos los dispositivos a la venta deberían traer ahora una etiqueta donde se detalla la potencia del artefacto y cuál es su promedio de consumo energético anual.
Esto sirve para el cálculo de cuánta demanda de nueva energía se estaría requiriendo en una casa, cuya instalación eléctrica ya viene supliéndola para otros electrodomésticos.
Por ello, verificar el estado de la instalación y su capacidad límite deberían ser los primeros pasos antes de una compra.
“Al pasar el tiempo, llegan más aparatos a las casas que aumentan la demanda de energía. Esto debería valorarse según sea la compra”, explica Francisco Hidalgo, director del área de Energía de la Empresa de Servicios Públicos de Heredia.
Antes de traer un nuevo electrodoméstico, sugiere Hidalgo, es preciso verificar que la red del hogar lo soporte para no exponerla a sobrecarga y, siempre, haciendo buen uso de ella.
“Mire, nos hemos topado gente que conecta al mismo tomacorriente hasta cinco aparatos o usuarios que jamás verifican que la conexión a tierra esté en buen estado”, alertó.
La conexión a tierra, recordó Hidalgo, es un mecanismo de seguridad para llevar eventuales desvíos de corriente de los aparatos hacia la tierra.
Esto evita que las personas reciban choques eléctricos de sus utensilios en caso de un corto circuito y, además, previene daños en la instalación y los aparatos,si hay variaciones de voltaje.
Hidalgo sugiere que en casas construidas hace más de siete años, la compra de electrodomésticos más potentes debería venir junto a una revisión en la toma a tierra que verifique su buen estado. De otro modo, el riesgo a un daño crecerá más.
Sin deudas. La último recomendación es menos eléctrica y más mercantil: haga lo posible por no endeudarse por hacer un regalo, advierte Cynthia Zapata, directora de Apoyo al Consumidor del Ministerio de Economía, Industria y Comercio.
“Vivimos un momento cuando la oferta de línea blanca, electrónicos y cosas caras de regalo, son propuestas a base de crédito. Todo está orientado así y la gente debe cuidarse”, señaló.
Zapata remarcó la importancia de no endeudarse por un regalo y, si es necesario el crédito para reponer un electrodoméstico en caso de emergencia, es crítico fijarse en el interés de la deuda en vez de la cuota del préstamo.
“Aunque una cuota sea baja, el interés no necesariamente lo es. Puede ser mejor comprarlo con ahorros o tarjeta de crédito. La evidencia que tenemos, tras años haciendo verificaciones de mercado, prueba que el material que firma el consumidor es a veces omiso”, alertó.