Un conductor de Uber denunció ser rodeado por taxistas, la mañana de este jueves, cuando fue llamado para brindar un servicio en el paseo Colón.
El chofer, identificado como Manuel Peña, contó que al llegar al sitio se percató de que no podía brindar el servicio porque eran cinco personas y ese número sobrepasaba la capacidad de su vehículo.
Peña indicó que se trataba de un grupo de extranjeros que llevaban tres niños de entre tres y cinco años y que se dirigían hacia el aeropuerto Tobías Bolaños.
Mientras les explicaba a los foráneos por qué no podía brindar el servicio, se le empezaron a acercar varios taxis que le impedían transitar.
"Para cubrir al cliente, le dije que ingresara al carro, mi preocupación eran los niños, les expliqué con mi poco inglés lo que estaba sucediendo", dijo.
"La gran sorpresa fue que el chofer de taxi que me golpeó la tapa del motor fue la misma persona que cogió el servicio con los cinco pasajeros, se llevó el servicio con cinco personas", añadió.
El conductor dijo que lleva unos tres meses como chofer de Uber y que ahora lo seguirá haciendo "con más razón".
Al lugar se hicieron presentes oficiales de la Fuerza Pública y de la policía de Tránsito. Sin embargo, el conductor no fue multado pues a la llegada de los tráficos no había ninguna prueba que indicara que estaba prestando un servicio ilegal.