Un promedio de 80 boletas de infracción emite la policía de Tránsito cada semana, en promedio, a conductores que combinan el volante y el celular de manera simultánea.
Esta es la principal distracción de los choferes, que buscan la manera de aprovechar el tiempo creciente que se gasta en las calles por el mismo trayecto, debido a las congestiones viales. Este es el tema de un reportaje testimonial que se publica mañana en La Nación.
En total son 2.550 infracciones reportadas desde que entró a regir la nueva Ley de Tránsito, cuyo artículo 145 sanciona con unos c100.000 a quien utilice el celular en carretera, sea para hablar, para enviar mensajes o navegar en Internet.
Incluso basta llevarlo en la mano, aunque oficiales de tránsito reconocen que se hace difícil castigar a todos los conductores que combinan volante con el celular, un aparato que ha llegado a ser "una epidemia", según el director de Tránsito, German Marín.
Otras actividades de los choferes durante las presas son comer, ver televisión, estudiar o maquillarse, según numerosas consultas hechas en carretera y mediante redes sociales. Estas actividades sin embargo, no son sancionables con la nueva ley.