El ICE podría reducir, en alrededor de un 7%, la generación térmica proyectada para el 2015, si la caída de lluvia es constante en el último trimestre de este año.
Para lanzar esa estimación, el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) tomó como referencia el estado actual de los principales embalses y lo comparó con el nivel calculado en meses anteriores.
Los resultados revelan que el fenómeno de El Niño ejerció un impacto menor al esperado, lo que permitió sacar más provecho de plantas con fuentes renovables.
Luis Pacheco, gerente de Electricidad del ICE, aclaró que es muy pronto para definir si esta realidad llevará a una reducción de las tarifas eléctricas de los usuarios, debido a que, según los estudios, los efectos de El Niño aún no cesan.
“Esperamos el comportamiento climático de los próximos dos meses para ratificar nuestra proyección: para el 2015 habría una baja en la generación térmica cercana al 7%, lo cual incide en el costo de la electricidad”, declaró Pacheco.
Gabriela Chinchilla, del Instituto Meteorológico Nacional (IMN), informó de que para el último trimestre del año se proyecta un escenario normal de precipitaciones.
Octubre suele ser el mes más lluvioso – en el caso del Pacífico y el Valle Central– mientras que diciembre es el más seco del periodo.
Estado hídrico. El embalse Arenal superó las expectativas: al 29 de setiembre, la represa más importante del país registró un nivel de 538 metros sobre el nivel del mar (msnm), en lugar de los 536 msnm que proyectó el ICE para esa semana.
Esto a pesar de que por escasez de lluvias, arrancara el año con una reserva de agua menor a la registrada en los últimos siete años.
La marca mínima establecida para esta planta hídrica es de 525 msnm. Arenal cuenta con capacidad instalada de 330 megavatios (MW) y aportó 627 millones de kilovatios hora (kWh) al Sistema Eléctrico Nacional (SEN), en el 2013.
Por su parte, el embalse de la hidroeléctrica Pirrís fue el que superó en mayor medida las expectativas del ICE: al 29 de setiembre registró un nivel de 1.203 msnm, en lugar de los 1.169 msnm calculados por el Instituto.
Pirrís, ubicada en la zona de Los Santos, es la tercera planta más grande del país, funciona desde 2011 y tiene capacidad para 30 millones de metros cúbicos (m³).
Esa planta registra una potencia de 134 MW y en el transcurso del 2013 generó 450 millones de kWh.
Por su parte, de acuerdo con los datos de setiembre, el embalse Angostura, en Turrialba de Cartago, superó en dos metros (msnm) la expectativa.
Angostura tiene una capacidad instalada de 180 MW y es la segunda que más genera energía en el país. En el 2013, aportó 738 millones de kWh para abastecer la demanda.
El caso es distinto para Cachí porque el nivel de la represa comenzó a descender desde inicios de julio debido a que está siendo sometida a mantenimiento y ampliación. La idea del ICE es hacer crecer su potencia de 105 MW a 158 MW.
Valioso. En el país, Arenal es el único embalse plurianual, es decir, es capaz de almacenar agua en un año para fines de generación en el próximo.
Según Pacheco, esa planta hidroeléctrica representa el 20% de la generación diaria requerida para satisfacer la demanda nacional.
Juan Manuel Quesada, intendente de Energía de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep), reconoció el optimismo de la realidad de los embalses, sobre todo en el caso del Arenal.
“Esta represa es la más importante, pues almacena agua para generar en los meses secos”, declaró.
Entre el 2012 y 2014, la generación eólica bajó un 7% (38 GWh) y por reducción de lluvias, la producción hidroeléctrica decreció un 6% (384 GWh). Ese déficit fue sustituido con térmica –subió un 19%– y el alza de un 470% en importaciones.
La caída en hídrica y eólica, aunada al alza del 1% (107 GWh) de la demanda energética, llevaron al país a carecer de 529 GWh. De estos, el 40% se cubrió con térmica, el 34% con importaciones y el 26% con producción geotérmica.