Juan Fernando Lara S.
La Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL) prevé un ahorro de ¢1.255 millones en dos años, por suprimir el uso de papel en los recibos para el cobro del servicio de electricidad.
Según la Compañía, la eliminación del papel en esa gestión generó en el 2016 un ahorro de ¢546,8 millones. Para este 2017, la proyección de recorte en este gasto será de ¢709,7 millones, precisó la entidad en un comunicado de prensa.
Este año, la empresa suprimió el envío a 537.690 abonados, incluidos 12.000 más a los previstos como meta en el 2106.
Excepciones. Adán Marchena, subdirector de Comercialización de la CNFL, indicó que únicamente 1.530 (0,28% del total de 540.000 abonados) seguirá recibiendo la factura impresa.
“Hablamos de 20 clientes que la recibirán en lenguaje braille, 512 clientes que demostraron carecer de acceso a la tecnología para recibir el cobro en formato electrónico y hay también 998 clientes que pertenecen al modelo de medidores colectivos”, indicó Marchena.
Como parte de sus esfuerzos de ahorro, el proyecto de eliminar la factura de papel se complementa con otras acciones como el incremento mensual del envío de la factura de cobro por medio de correo electrónico, los cuales ya rondan casi los 100 .000 y de 170.000 mensajes SMS que se remiten aproximadamente por mes.
Este año, esta subsidiaria del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) pagó ¢4.143 millones a 111 funcionarios que se acogieron a un segundo plan de movilidad voluntaria impulsado. En promedio, cada extrabajador se lleva ¢37 millones.
Óscar Hernández, director de Finanzas de la CNFL, proyecta que la firma se ahorrará por la reducción de esas 111 plazas ¢3.865 millones anuales.
Según la Compañía, con los recursos generados por la operación ordinaria de la empresa, esta afrontará el pago de prestaciones que requirió esta movilidad. El monto, afirma, se recuperaría en 13 meses.