¿Puede un trabajador independiente mentirle a la Caja respecto a sus verdaderos ingresos económicos? Sí.
Entonces, ¿cómo hace la Caja para dar por válido lo que un trabajador individual dice que gana mensualmente? Para ello, se le realizan desde una entrevista en profundidad, hasta un análisis históricos de ingresos, especialmente si la persona tuvo alguna vez un patrono.
Lo cierto es que nada de eso garantiza que no haya evasión en las cotizaciones, reconoció el gerente financiero de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), Gustavo Picado.
Lo real es que luego de la entrevista con el trabajador, la Caja verifica la información, hasta donde le sea posible.
Luego de ello –explicó Picado–, se determina un ingreso promedio de ese empleado.
El primer monto que se determina es el ingreso bruto, pero con la cifra neta es que se establece el porcentaje y monto de cotización.
“Si vemos el caso de un consultor, esa persona debe descontar los gastos en los que incurrió para dar un servicio, en particular. El monto que resulte, de ese ejercicio, será por el cual deberá cotizar ante la Caja”, dijo Gustavo Picado.
Para determinar eso último, la Caja tiene cinco escalas de ingresos, y con base en eso, también se determina cuánto aporta el trabajador independiente y cuánto dará el Estado para completar una cotización de 12%.
Los que están en la escala más baja (que tienen ingresos entre los ¢121.000 y unos ¢250.000) cotizarán un 8% sobre su el monto reportado y el Estado da el 4%.
En el otro extremo de la escala están aquellos que superan ingresos por un millón de colones, que deben asumir la totalidad del 12% de cotización.
Por otra parte, cuando el trabajador independiente pasa a ser asalariado por cuenta de un patrono, deberá informar el cambio de condición, para no entrar en morosidad.