La contaminación con diésel, del tanque principal que abastece de agua al Hospital Calderón Guardia (HCG), obligó ayer a la suspensión de cirugías programadas y a establecer estrictos controles de higiene, para este fin de semana, en ese centro médico.
Las únicas operaciones quirúrgicas, que se llevaron a cabo, fueron las de emergencia y no se informó, hasta ayer, si las previstas para el lunes siguen en pie.
Hasta este viernes, por la tarde, las autoridades del hospital desconocían la fuente de contaminación del agua, porque estaba abierta la posibilidad de que lo ocurrido fuera un acto criminal.
Eso llevó a la Dirección Médica del centro a presentar una denuncia ante el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), informó el hospital a este diario.
La alerta sobre la contaminación del agua ocurrió el jueves, a eso de las 6 de la tarde, cuando varios funcionarios notaron que “al abrir los tubos se percibía un olor extraño en el agua”, explicó el hospital por medio de su encargada de prensa, Rita Henry.
Desde que se dio la alerta, personal del hospital y de la empresa que tiene a cargo el mantenimiento del tanque principal –de la cual no se informó el nombre– trabajaron para vaciar y limpiar la estructura.
Esa labor quedará completada este fin de semana, pero el tanque funcionará hasta que haya seguridad sobre cuál fue la fuente de la contaminación.
Acciones. A partir de la detección del diésel en el agua, el Hospital Calderón Guardia cerró las llaves principales que distribuyen ese líquido en toda la torre norte, que fue la única afectada por lo ocurrido.
Desde la noche del jueves y en lo que resta del fin de semana, se utilizará un tanque secundario, informó el hospital, aunque también fue necesaria la colaboración del Instituto de Acueductos y Alcantarillados (AyA), que dispuso un camión cisterna para el centro médico.
En cuanto a la atención de los pacientes hospitalizados, el agua para consumo les fue suministrada en botellas plásticas. El hospital no informó sobre la cantidad de envases que adquirió para dicho fin.
Por otra parte, la Dirección Médica del Hospital Calderón Guardia manifestó que, pese a lo sucedido, se mantenían, sin alteración, los horarios de visita de los familiares a los pacientes.