Mónica Araya formaba parte de la delegación de cambio climático de Costa Rica ante la ONU y Carlos Valverde era el director de Planificación de Recope, pero, según dijeron ambos, fueron quitados de sus puestos por el Gobierno tras criticar la nueva refinería de petróleo que el país negocia con China.
Ellos no tienen nada en común. Mientras ella colaboraba con el Minae en negociaciones sobre cambio climático, él impulsaba el proyecto de una nueva refinería.
Valverde es ingeniero civil, tenía 25 años de trabajar en la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) y fue uno de los impulsores del plan de $1.500 millones que promueven los Gobiernos de China y Costa Rica .
Las críticas de Valverde eran sobre los cálculos de viabilidad.
El 1.° de marzo del 2011, el presidente de Recope, Jorge Villalobos, llamó a Valverde a su despacho y le dio la carta de despido.
“Cuando don Jorge (Villalobos, presidente de Recope) me llamó a su oficina y me dio la carta (de despido), yo le pregunto por qué, y me dijo: ‘Mirá, pensamos diferente, tenemos diferencias ideológicas’. Fue lo único que me dijo”, expresó anoche Valverde.
Se intentó conocer el criterio de Villalobos, pero la oficina de prensa dijo que está fuera del país.
Al respecto, el gerente general de la Refinadora, Jorge Rojas, dijo desconocer si hay relación entre la salida de Valverde y sus objeciones a las previsiones de rendimiento que en el 2011 arrojó un estudio de la firma china Huanqiu, encargada de probar la viabilidad del plan.
“Yo me abstengo de opinar de la separación de él (Valverde)”, dijo Rojas, quien alegó que desconoce si hay algún tipo de persecución.
En el caso de Mónica Araya, su salida como asesora del equipo de negociadores de cambio climático de Costa Rica consta en un correo que circuló , el 12 de junio, entre delegaciones internacionales de los Gobiernos de Australia, Reino Unido y Ghana.
En el correo se señala que, “por decisión del Gobierno de Costa Rica, la señora Mónica Araya ha sido liberada de sus obligaciones como asesora externa del Minae”.
Araya manifestó ayer desde Oslo, Noruega, que tuvo una diferencia con el ministro de Ambiente, René Castro, cuando le expuso su punto de vista, pero que no imaginó las consecuencias.
“Cuando se dio la separación, el jefe de la delegación de Costa Rica en las negociaciones de cambio climático de las Naciones Unidas me dijo que fue un error haber hablado en contra de la refinería en el programa de Amelia Rueda”, afirmó.
Consultado al respecto, Castro dijo que no incluir a Araya en la delegación tica no lo decidió él, y que es una “coincidencia” que la decisión se tomara poco después de que hablara en el programa radial.