El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) recopiló, en la sede del PAC, copia de toda la documentación relacionada con la contratación del abogado y dirigente Jorge Sibaja Rodríguez, quien facturó unos ¢300 millones por autentificar firmas en los documentos de la campaña electoral, aunque ese trámite era innecesario.
Funcionarios del Departamento de Financiamiento de Partidos Políticos del TSE recogieron 27 carpetas con información.
Según confirmó el tesorero rojiamarillo, Anthony Cascante, el Tribunal se llevó copias de los contratos, de las más de 20.000 certificaciones de firmas que hizo Sibaja y del libro de actas del anterior Comité Ejecutivo del PAC, en que se plasmaron los acuerdos en torno a esa relación laboral.
“La mayoría de la documentación que se llevaron ya la habíamos enviado dentro de la liquidación de gastos, aunque esos pagos no se incluyeron dentro de la partida de gastos redimibles”, dijo Cascante.
La recopilación de la información se hizo para determinar si el TSE admite para estudio una denuncia contra el PAC por la forma como se hicieron los pagos.
Según el director del Departamento de Registro Electoral del Tribunal de Elecciones, Héctor Fernández, esa queja fue presentada por miembros de la comisión investigadora que instaló la agrupación para analizar los gastos en la última campaña electoral.
“Por confidencialidad no puedo precisar en los detalles de la denuncia; solo le puedo decir que es sobre el manejo de los pagos a ese abogado”, señaló Fernández.
El fiscal del PAC y quien lidera la comisión investigadora, Mario Ramírez, asegura desconocer el contenido de la denuncia y quién la presentó.
“La comisión trabaja como un órgano colegiado; voy a preguntar en el TSE y a lo interno quién hizo esa gestión; me toma por sorpresa”, agregó Ramírez.
Sibaja facturó al PAC ¢325 millones, de los cuales solo cobró en efectivo ¢117 millones pues el resto lo donó en especie. A última hora, esos pagos no se cobraron dentro del porcentaje de la deuda política, porque La Nación dio a conocer que las firmas que autentificó Sibaja no eran necesarias.