El presidente de la República, Luis Guillermo Solís, reiteró su confianza en el manejo que el Banco Central de Costa Rica (BCCR) le está dando al precio del dólar, el cual superó esta semana los ¢580 en las ventanillas, su punto más alto en siete años.
El mandatario recalcó que el BCCR es una institución autónoma ajena a las decisiones políticas y que cuando el tipo de cambio estuvo bajo, y los sectores exportadores alegaban que perdían competitividad por ello, él respetó los criterios técnicos y evitó intervenir.
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"Sobre este tema al país entero le consta que mi actitud cuando el dólar estaba bajísimo, fue que el Banco Central tiene los instrumentos necesarios para el manejo de las divisas", dijo Solís ante la consulta de La Nación, esta mañana en una actividad de CR Digital en el Centro Nacional de la Cultura.
"Yo con el Banco no me voy a reunir para cambiar su política cambiaria que ha sido impecable y técnica... Si lo hago van a decir que estoy manipulando las decisiones del banco. Yo confío en los técnicos del Banco Central", reiteró el mandatario.
Solís adujo que, en el pasado, tampoco cedió a solicitudes de intervención de grupos que estaban interesados en devaluar el colón, para que subiera el precio del dólar.
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"Lo que es bueno para el ganso es bueno para la gansa. Sé el efecto que tiene en más de medio millón (de personas) que tienen sus préstamos en dólares, la política cambiaria tiene que ver mucho con la vida de la gente, por eso he sido tan exigente conmigo mismo de frenar cualquier intención de intervenir llamando al presidente o a la junta directiva pidiendo que por razones políticas se cambien las decisiones del banco", agregó.
Solís señaló que los efectos por este fenómeno se pueden contrarrestar con una economía más fuerte, pero para ello el gobierno también requiere de más ingresos.
Según el BCCR, las alzas del precio del dólar obedecen a variaciones de la situación económica del país y el entorno internacional.
Entre los factores señalados, están que en el mercado cambiario local hay menos divisas en comparación con años previos, pero la demanda es alta. Además, aumentó el costo de las materias primas –petróleo principalmente– y se inició un proceso de incremento en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED).