Asamblea Legislativa
Los académicos Roberto Artavia y Miguel Gutiérrez Saxe, del Instituto Centroamericano de Administración de Empresas (INCAE) y del Programa Estado de la Nación (PEN), respectivamente, coordinarán las diálogos de los nueve partidos políticos que explorarán una agenda común para el gobierno 2018-2022.
La mesa facilitadora fue instaurada este martes por el diputado Ottón Solís, de Acción Ciudadana (PAC), y contó con la presencia de los presidentes de los partidos PAC, Liberación Nacional (PLN), Unidad Social Cristiana (PUSC), Movimiento Libertario (ML), Frente Amplio (FA), Alianza Demócrata Cristiana (ADC), Renovación Costarricense y Restauración Nacional.
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El diálogo pretende que los grupos políticos alcancen un acuerdo de gobernabilidad, sobre reformas en materia económica, social e infraestructura, de manera que el próximo gobierno cuente con una agenda de proyectos de ley que serían aprobados fácilmente en la Asamblea Legislativa.
Roberto Artavia dijo que aún no hay un cronograma de reuniones entre partidos, pero advirtió que el plazo límite para alcanzar la agenda de consenso es marzo del 2017, en vista de que se quiere tener el acuerdo antes de que se inicie la campaña electoral con miras al 2018.
Añadió que los presidentes partidarios fueron claros al decir que tienen voluntad de encontrar un terreno común con respecto a proyectos clave, que permitan lograr más progreso social inclusivo y una mejor productividad, acompañados de sostenibilidad.
"Nuestro papel es de facilitación, coordinación, de asegurarnos de que las reuniones se den puntualmente, de que se presenten los proyectos de la forma en que han sido articulados, que se facilite llevar esos proyectos a las iniciativas de ley y decretos para que, al final, tengamos proyectos muy concretos con qué avanzar en misiones y objetivos", dijo Artavia.
El académico vislumbró un trabajo intenso durante los siguientes cinco meses. El coordinador dijo que el escenario ideal será tener más reuniones tipo encerronas durante los meses de diciembre del 2016 y enero del 2017.
Las prioridades, puntualizó, saldrán de los temas que ya han planteado los partidos participantes en sus programas de gobierno de campañas pasadas.
Por su parte, Ottón Solís dio por finalizada su participación en el proceso, pues él no estará presente en las conversaciones que tengan las fuerzas política a partir de ahora. Él no teme que el adelantamiento de los fuegos electoreros, tanto en el PLN como el PUSC, amenacen la búsqueda de acuerdos.
"Antes de que revienten los fuegos electorales el año entrante, tienen que estar los acuerdos listos y que sean compromiso de campaña de todos los partidos. En segundo lugar, los acuerdos deben ser sobre detalles de los grandes temas, de tal manera que nadie tenga excusa después para decir que no está de acuerdo y lo otro es que haya una mesa facilitadora de altísimo nivel para que convoque y elabore especificidades y las traiga a la mesa de negociación", adelantó Solís.
Sobre su propuesta original de que el Gabinete del próximo gobierno esté integrado por personas de todos los partidos políticos, Solís dijo que ese punto de la convocatoria se descartó.
"Eso no es el corazón del acuerdo (el gabinete mixto). El corazón es un esfuerzo por llegar a acuerdos sobre puntos sustantivos y llegar a los detalles de los asuntos. Lo otro era una propuesta adicional, pero no importa si no se hace, lo importante es que el gobierno que gane cuente con la posibilidad de ejecutar todo esto", afirmó.
Agenda fiscal y de pobreza. La presidenta del Ejecutivo del FA, la diputada Patricia Mora, dijo que todos los partidos comparten la aspiración de vivir en una sociedad que se pueda llamar digna.
Esa característica, según Mora, pasa por que las fuerzas políticas logren acuerdos en grandes temas nacionales como aumentar la carga tributaria de forma progresiva y reducir la pobreza. "Estamos entrando con la esperanza de que logremos consensuar dos o tres proyectos que reflejen un acuerdo nacional", estimó la jerarca frenteamplista.
El presidente del ML, Danilo Cubero, por su parte, resaltó que es necesario llegar a acuerdos sobre la reactivación económica del país.
Al ceder la coordinación del proceso de diálogo, Ottón Solís hizo énfasis en que su intención no es utilizar el proceso de diálogo de plataforma para lanzar una cuarta candidatura presidencial para el 2018.
"En este país hay nombres que causan polémica. A veces me cuesta creer que haya gente que no me crea cuando digo que no volveré a aspirar a la Presidencia de la República", afirmó.
Ottón Solís celebró que los partidos políticos aceptaran sentarse a dialogar sin necesidad de que el país se encuentre en una crisis política, aunque él dijo que considera que la nación se mueve en una "modorra" que perjudica la eficiencia del Estado.