El Gobierno catalogó como una campaña de desprestigio las denuncias divulgadas por la prensa en las últimas semanas ante la falta de planos y estudios de impacto ambiental en la construcción de la trocha fronteriza con Nicaragua.
El vicecanciller Carlos Roverssi aseguró que la información –reproducida por medios de comunicación ticos– la aprovechan los vecinos nicaraguenses para atacar al país y denunciar un daño ambiental que “no existe”.
“En días anteriores se ha realizado una campaña en contra de la trocha fronteriza, enfatizando que esta se hizo sin planos o estudios de impacto ambiental, lo cual ha llegado a sugerir que toda la obra es un desastre ambiental e ingenieril y más grave aún, que se le está causando daño al río San Juan”.
“Es falso que se le esté causando daño al río San Juan y eso se debe desmentir”, insistió Roverssi.
Eso sí, el vicecanciller no hizo referencia a que entre diciembre del 2010 y diciembre del 2011, la maquinaria avanzó en zonas de bosques, ríos y humedales sin valorar el impacto sobre el entorno, sin realizar un inventario forestal ni nombrar un regente ambiental.
Las declaraciones de Roverssi se enmarcan en una conferencia de prensa convocada por Casa Presidencial ayer para “aclarar” la situación del proyecto.
En la conferencia también estaban presentes los ministros de Seguridad, Mario Zamora; Comunicación, Francisco Chacón; Transportes, Luis Llach, y Ambiente, René Castro.
Ayer sostuvo que de los ¢24.518 millones ejecutados a la fecha, un 57% (¢14.018 millones) corresponden a los 154,6 kilómetros de la trocha, que va de Los Chiles (Alajuela) a Delta Costa Rica, en el Caribe.
El 43% restante (¢10.500 millones) se destinaron a rehabilitar 383 kilómetros de rutas de acceso.
Agregó que está interesado en reunirse con representantes del Colegio Federado de Ingenieros y de Arquitectos (CFIA) y con los voceros del Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (Lanamme) para aclarar los costos de la obra fronteriza.
En Ambiente, René Castro reconoció que en todo proyecto vial hay un impacto en el entorno y que es falso que no exista un plan de mitigación. Aseguró que su dependencia tiene un programa de reforestación y siembra de gramíneas para evitar deslaves en los taludes.
Horas más tarde, en el Congreso, el diputado socialcristiano Luis Fishman le pidió al Ministerio de Hacienda que corrobore si las firmas contratadas para levantar la trocha pagaron el impuesto de la renta acorde al ingreso percibido.
Mientras, su compañero de fracción, Wálter Céspedes, presentó una denuncia penal en contra del Consejo Nacional de Vialidad, por no entregarle información sobre el proyecto fronterizo.
Por último, la agencia ACAN-EFE reportó que en Nicaragua el Gobierno decretó “alerta amarilla” (preventiva) en la provincia y la cuenca del río San Juan, a causa de “ la destrucción del medio natural” producida supuestamente por la construcción de la trocha.