El diputado del Partido Liberación Nacional (PLN) Alfonso Pérez aseguró que Acueductos y Alcantarillados (AyA) y la Municipalidad de Turrialba inauguraron una cañería sin agua en la comunidad de Alto Quetzal.
Pérez denunció que dicha inauguración fue ficticia, solo para “burlar” a los pobladores.
El congresista hizo el reclamo en el plenario de la Asamblea Legislativa ayer por la tarde.
“Dirigentes comunales de esa zona, y hasta municipales, me dijeron que la Alcaldía les estaba pidiendo transportar unos estañones y llenarlos con baldes de agua para que en el acto simbólico de abrir el tubito saliera agua. Siento vergüenza ajena”, dijo Pérez.
El congresista añadió que a los indígenas de varias comunidades aledañas les prometieron que la presidenta, Laura Chinchilla, llegaría al evento.
“Fingieron que había agua. Siento mucha vergüenza ajena y pido también una disculpa ajena, aunque se trata de compañeros del Partido”, agregó el diputado.
La inauguración del acueducto se hizo el 21 de setiembre pasado.
La presidenta ejecutiva de AyA, Yessenia Calderón, negó que hubiese un engaño en la inauguración simbólica que hicieron en Alto Quetzal.
La jerarca aseguró que se escogió ese lugar para inaugurar los acueductos de tres comunidades indígenas que están adentro, en la montaña, y a los cuales el acceso es muy difícil.
Esos acueductos son los de Ñari-ñac, con un costo de ¢48 millones; Roca Quemada, ¢35 millones, y el de Alto Ñari, ¢56 millones.
“Por efectos de logística, no se podía ir a las tres comunidades, la de entrada es Alto Quetzal; por eso la actividad de inauguración se hizo ahí, donde tenemos un proyecto en construcción”, aseguró la presidenta de AyA.
Aunque Calderón tampoco asistió al acto, dijo que el agua de los estañones se llevó para atender a las personas que sí llegarían a la inauguración. “Fue una inauguración simbólica de los otros tres sistemas”, insistió.
Carlos Roverssi, ministro de Comunicación, dijo desconocer el asunto, pero aseguró que pedirían las explicaciones del caso.