El magistrado penal Celso Gamboa confrontó a la cúpula de la Corte Suprema de Justicia para evitar que se votara una propuesta para suspenderlo de su cargo, por tres meses, mientras se investigan sus vínculos con el cuestionado importador de cemento Juan Carlos Bolaños.
Este miércoles, justo antes de que los magistrados sesionaran para debatir su caso, Gamboa envió un escrito a la Corte Plena en el que recusó al 15 de los 22 magistrados que la integran.
Los recusados debieron salir del salón en que discutiría la medida disciplinaria y la sesión, que se inició a las 2 p. m., debió suspenderse para efectuar un sorteo a fin de traer suplentes.
Entre los recusados, estaban Carlos Chinchilla (presidente de la Corte), Román Solís, Julia Varela, Flora Marcela Allón Zúñiga, Nancy Hernández, Fernando Cruz, Jesús Ramírez, Héctor Blanco y Doris Arias.
Recompuesta con dos suplentes, para completar 15 magistrados presentes, la cúpula del Poder Judicial le dijo no a las recusaciones de nueve magistrados que estaban integrando la Corte Plena cuando se abrió la sesión. No fueron vistas las otras seis porque no estaban presentes y, por tanto, no era urgente, informó el magistrado Luis Fernando Salazar.
La razón por la que Gamboa recusó a Chinchilla, Arias y Ramírez fue haber participado, junto con él, en la resolución mediante la cual la Sala III desestimó una causa penal, por supuesto tráfico de influencias, contra Juan Carlos Bolaños, los diputados Víctor Morales Zapata y Otto Guevara, así como el exdiputado Wálter Céspedes.
Esa desestimación provocó, posteriormente, la separación del fiscal general, Jorge Chavarría, porque al presentársela a la Sala III no incluyó un informe del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) que registraba centenares de contactos telefónicos entre los investigados.
El magistrado presidente alegó que él "no tenía relación directa con lo investigado en ese proceso".
A las 9:30 p. m., la Corte Plena seguía discutiendo una por una las recusaciones, sin haber podido entrar a debatir la separación de Gamboa.
Los magistrados Román Solís, Luis Guillermo Rivas, Doris Arias y otras tres fuentes confiables confirmaron a La Nación lo sucedido.
Uno de los recusados, el magistrado Román Solís, relató que ellos debieron salir del salón de sesiones para que la Corte se integrara con magistrados que no fueron recusados. "Ellos ven el traslado de los cargos a cada uno de nosotros para nuestra defensa", dijo.
Román Solís relató que, en su caso, la recusación es "extraña" porque Celso Gamboa lo ofreció como testigo y, en esa condición, no puede participar en la decisión. Él alegó que esa no era causal para recusarlo. "Cada uno tiene causales distintas", afirmó.
Doris Arias declaró: "Me llama la atención que a algunos sí y a otros no (...). Todavía no nos han mostrado las razones de la recusación. Para mí fue sorpresivo que él nos recusara, pero en realidad no le sabría decir en este caso concreto qué es, todavía está en estudio, es muy reciente".
El magistrado Luis Guillermo Rivas, quien no fue recusado, recordó que Fernando Cruz fue recusado por declaraciones ofrecidas en diversos programas.
Rivas agregó que Celso Gamboa también recusó a Román Solís porque este último invitó a celebrar el décimo aniversario de relaciones Costa Rica-China y a Julia Varela porque ella estuvo con él en esa actividad, aunque al final Solís no asistió.
La recusación consiste es el acto de rechazar a una persona por considerarla no apta o inadecuada para una tarea. En términos de Derecho, se utiliza cuando alguien alega que la imparcialidad de un juez está en duda.
Este hecho se produce justo el día en que CRHoy dio a conocer que los tiquetes aéreos mediante los cuales viajaron a Panamá Celso Gamboa y Juan Carlos Bolaños, en octubre del 2016, se compraron con la misma tarjeta de crédito.
LEA: Viajes de Celso Gamboa y Juan Carlos Bolaños a Panamá se pagaron con la misma tarjeta
La compra fue hecha en el sitio web dedicado a vender tiquetes en línea Expedia Travel, uno de los más populares del mundo.
Los tiquetes fueron comprados el 7 de octubre del 2016 y fueron utilizados para hacer un viaje corto, vía Copa Airlines, del 9 al 11 de octubre del 2016. Costaron ¢922.000.
Celso Gamboa había alegado que el hecho de que él viajara y regresara en el mismo avión que Juan Carlos Bolaños había sido una casualidad, pues él viajó a comprar ropa de bebé a Panamá.
Este miércoles, mediante una publicación en Internet, el magistrado insistió en que él pagó el tiquete con su dinero y no viajó con ningún costarricense.
"Yo pagué mi boleto, los motivos de mi viaje son totalmente ajenos a Bolaños, sus créditos o negocios, este señor nunca me ha pagado nada, esto es un asunto de mi vida matrimonial que estoy resolviendo en casa".
Por su parte, Bolaños afirmó: "Quiero ser claro y contundente que yo no le pague ningún tiquete al señor Gamboa, esa afirmación es falsa e incorrecta, y no es posible una compra de boletos con tarjetas mías o de mis empresas".
No obstante, al preguntársele quién pagó su boleto y al pedírsele copia de su comprobante de compra, el importador no respondió.
La solicitud de separación de Gamboa, que se iba a discutir este miércoles, provino de dos vías: del presidente de la Corte Suprema de Justicia, Carlos Chinchilla, y del Sindicato de la Judicatura (Sindijud).
Ambas solicitudes se discutirán durante una sesión privada de la Corte Plena, esta tarde, según confirmó el magistrado presidente.
Por vía telefónica, Chinchilla confirmó que él elevó la petición de suspensión para Gamboa ante la Corte Plena, en conjunto con la gestión de los sindicalistas, para la separación del cargo temporalmente.
El magistrado presidente explicó que la suspensión sería por tres meses, inicialmente, y que luego se puede prorrogar por todo el tiempo que sea necesaria.
"Yo no podría entrar a analizar los motivos (para solicitar la suspensión), porque están en un ámbito propio del secreto del expediente, pero hay muchos que la prensa ha tenido, por ejemplo estos últimos de los viajes pagados con una misma tarjeta de crédito y los dos asientos a la vez, son cuestiones de este tipo que no se pueden ocultar y que salen públicamente", comentó Chinchilla a La Nación.
El presidente del Poder Judicial añadió que, inicialmente, el Sindijud solicita la aplicación de medidas y que él aporta un informe adicional, donde hace un recuento de "todo lo que tenemos en la causa" y las razones por las que él, ahora, también solicitó la separación de Gamboa.
"Es el momento de tomar medidas más claras, más directas, que tienen que ser importantes. Es una situación en la cual está inmerso no solo el Poder Judicial, sino todo el país; yo creo que no son medidas emocionales, son medidas jurídicas acordes con lo que está sucediendo en este momento", apuntó Chinchilla.
El magistrado presidente añadió que, al aplicar esta medida, la Corte Plena no está juzgando nada por adelantado ni diciendo que "una cosa al final se va a representar con otra", sino que la medida de suspensión es la adecuada para la situación actual.
En el caso de la solicitud de Sindijud, Jorge Luis Morales, secretario general, explicó que presentaron su gestión desde finales de setiembre, para respetar el debido proceso.
"Esa es la medida cautelar que establece la Ley Orgánica del Poder Judicial. A finales de setiembre, consideramos que ya se configuraban las circunstancias necesarias para la suspensión, por los hechos denunciados en la prensa y que consideramos perfectamente verificables", dijo Morales.
El sindicalista afirmó que les preocupaba que la Corte Plena le estaba dando largas al asunto y no se definía, por escrito, cuándo se iba a conocer la solicitud de separación que ellos hicieron.
"Es de lo mejor que le puede pasar a este país, que las cosas sigan el trámite legal e institucional establecido y que poco a poco la ciudadanía vuelva a recuperar la confianza en los organismos establecidos. No se trata de que se vayan personas, sino que nos demos cuenta de la necesidad de reestructurar la forma en que estas personas han llegado a puestos de poder", dijo Morales en referencia a la forma en que se eligen magistrados y jerarcas en el Ministerio Público.
"El ambiente que se percibe dentro de la institución es de mucho temor. Hay mucha desazón, son sentimientos que se perciben en el ambiente y hay frustración porque se sabe que la mayoría de los empleados judiciales hemos pasado por un sistema de selección muy riguroso y, por lo general, hacemos nuestras funciones con la más alta honorabilidad, pero cuando pasa esto, uno entiende el común de la gente que cuestiona absolutamente a todos los empleados judiciales, uno sufre el efecto el psicológico de ese cuestionamiento y da dolor", recalcó el sindicalista.