El Gobierno de Costa Rica presentó este mediodía dos proyectos fiscales que pretenden aumentar los ingresos en un 2,75% del Producto Interno Bruto (PIB), mediante la reforma de los impuestos de ventas y de renta.
Ambos proyectos buscan captar unos ¢600.000 millones.
Así lo indicó hoy, martes, el Ministerio de Hacienda que presentó sus dos propuestas de ley, al público, en espera de recibir observaciones de ciudadanos y sectores, a fin de enviar las iniciativas a los diputados, en abril de este año.
Aunque la promesa del Gobierno era no presentar proyectos de aumentos de impuestos, en los primeros dos años de su administración, el viceministro de Hacienda, Fernando Rodríguez, justificó que la intención es avanzar en el trámite de ambas reformas legales, a fin de que sean aprobadas en el 2016.
Cambios. La reforma al impuesto de ventas, lo convertiría en un "impuesto al valor agregado" (IVA), y gravaría los productos y servicios hasta en un 15%, a partir del 2017. Ese porcentaje de un 15%,lo pagarían los profesionales liberales y empresas que brinden servicios hasta ahora exentos.
Los centros educativos privados se mantendrían libre del impuesto, además, del transporte y de algunos sectores de la salud privada.
Con el otro proyecto, dirigido al impuesto a la renta, se intenta gravar a los salarios más altos pues se crean dos escalas adicionales, según las cuales se pagaría un 20% de tributo sobre un ingreso superior a ¢2.225.000; así como, un 25% sobre los ingresos de ¢4.450.000.
Por su parte, quienes ganen menos de ¢2.225.000, seguirán pagando como hasta ahora, explicó Fernando Rodríguez.
En la conferencia de prensa de este mediodía, en Casa Presidencial, el jerarca también señaló que se pretende fijar una tasa de un 15% sobre las rentas de capital.