Dos polémicos proyectos de cooperación financiados por China serán parte de la conversación de más de 40 minutos que tendrá el presidente Luis Guillermo Solís con su homólogo chino Xin Jinping, cuando ambos coincidan la próxima semana en Brasilia.
Solís confirmó ayer que, aunque la cita tendrá agenda abierta, seguro hablarán del futuro de los planes para una refinería conjunta con Recope y la ampliación de la ruta 32, que lleva al Caribe.
Ambos proyectos fueron criticados por el hoy oficialista Partido Acción Ciudadana (PAC), desde que fueron firmados en los gobiernos de Óscar Arias (refinería) y de Laura Chinchilla (ruta 32).
Ahora los dos temas están paralizados, a la espera de un posible replanteamiento después de cuestionamientos económicos, administrativos e incluso legales.
En el caso de la refinería, que exigiría una inversión de $1.500 millones, se trata de un plan conjunto entre la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) y China Petroleum Engineering and Construction Corporation (CPECC).
Una de las objeciones es que la estatal CPECC encargó el estudio de factibilidad a la firma HQCEC , con la cual tiene nexos, por lo que las estimaciones de rentabilidad no resultan confiables.
El otro proyecto es la ampliación de un tramo de la ruta 32, por $395 millones, pero se le cuestiona falta de sustento para ese monto y otros problemas legales.
El futuro de estas iniciativas dependerá de nuevas negociaciones con China, país con el que Costa Rica estableció relaciones diplomáticas en 2007, con un fuerte componente de cooperación que incluyó la donación del Estadio Nacional.
Solís tratará estos temas acompañado de sus ministros de Relaciones Exteriores, Manuel González, y el de Presidencia, Melvin Jiménez. Se van este martes y regresarán el domingo 20 de julio.
Durante su estadía en esa nación, el mandatario costarricense también se reunirá con la presidenta anfitriona, la brasileña Dilma Rousseff y con la gobernante chilena Michelle Bachelet.