05/10/2010.Hora 10:04 a.m. La carretera Radial Sabana a La Aurora de Alajuelita tiene grandes derrumbes en el tramo que atraviesa Hatillo 2 y 8. En la foto CARLOS GONZALE/GRUPO NACION. (CARLOS GONZALEZ CARBALLO.)
Las fallas en los taludes de la radial Hatillo-Alajuelita-Escazú dieron origen a una demanda presentada por la Contraloría General de la República contra la compañía constructora Autopistas del Sol, hoy llamada Globalvia Ruta 27.
El tramo de apenas 1,7 km fue inaugurado en el 2009 y un año después, el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) la cerró por el constante derrumbe de los taludes, lo que ponía en riesgo casas en Hatillo y lanzaba material a la calzada.
Para corregir estos problemas, el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) tuvo que contratar otra empresa para levantar muros pasivos que soportaran la carga y las vibraciones, además de muros de contención.
Una investigación del ente contralor determinó que el Estado gastó ¢2.598 millones en las reparaciones, monto que ahora reclama ante el Tribunal Contencioso-Administrativo.
Además, le exige a la firma el pago por indexación, intereses y costas del proceso judicial.
Según la Contraloría, la empresa se había comprometido al diseño y construcción de la obra mediante el sistema de suma alzada de $9 millones.
“No obstante dichas obligaciones, las obras fueron efectuadas incumpliendo con la técnica y la sana práctica de la ingeniería, lo cual se acredita con estudios técnicos efectuados posteriormente por instancias especializadas (...)”, alegó la entidad.
Desde diciembre. La demanda se presentó desde diciembre del 2014, pero fue dada a conocer ayer. El Conavi, la Procuraduría General de la República –en representación del Estado– y el Consejo Nacional de Concesiones, figuran como partes en el proceso.
Representantes de Globalvia evitaron emitir criterio.
Montserrat Courrau , vocera de la compañía, se limitó a informar de que no pueden referirse al tema debido a que el caso está en desarrollo en los tribunales.
La construcción de esa radial formó parte del contrato de concesión de la carretera San José-Caldera (ruta 27).
En otras secciones de esa misma vía, se registra un problema similar de derrumbe de taludes.
En este momento, el Estado y Globalvia están envueltos en un proceso de arbitraje.
La concesionaria reclama $44 millones más por reajustes en el costo de la carretera a Caldera, que tiene 76,7 kilómetros.
La estimación inicial para la obra era de $258 millones, pero la firma reclama un aumento en el costo, basándose en el tiempo que el Estado tardó en expropiar los terrenos necesarios para poder avanzar con el proyecto.