Mientras que los residentes del barrio el Socorro, en Santo Domingo , vieron cómo una de sus casas más viejas se iba a pedazos, los vecinos de Sanjosecito de San Isidro de Heredia fueron testigos de cómo – tabla por tabla – esa misma casa se levantó.
Se trata de una reliquia de unos 100 años de antigüedad, propiedad de la familia Tournón.
Tras la venta de la finca donde estaba la casa, los dueños decidieron conservar la construcción, pero trasladada por completo a otro sitio.
Este esfuerzo fue recompensado con el Premio 18 de Abril, que otorga el ICOMOS (Internacional Council on Monuments and Sites), cuyo nombre en español es Consejo Internacional de Monumentos y Sitios Históricos .
ICOMOS es una entidad integrante de las Naciones Unidas y se dedica a conservar lugares históricos en el mundo.
“La UNESCO estableció que el 18 de abril fuera el Día Nacional de los Monumentos Históricos. En Costa Rica decidimos dar ese premio a alguna labor de conservación ”, comentó Zulay Soto Méndez, coordinadora de la comisión que otorga el reconocimiento.
El premio se define en abril, pero, como este año coincidió con la Semana Santa , la escogencia se realizó después.
Guiados por el lema “ No se construye el mañana demoliendo el ayer ”, el jurado estudió los cuatro objetos postulados, entre los que la Casa del Cafetal se llevó el premio por unanimidad.
“Se valoró la iniciativa personal de esta familia. Es un ejemplo de cómo las personas pueden contribuir al rescate del patrimonio cultural arquitectónico del país”, agregó Soto.
Por su parte, doña Pascal Tournón, propietaria de la casa, afirma que el reconocimiento le dio mucho orgullo.
“ Mucha gente bota todo para hacer dinero, pero yo no. La trasladé porque es una obra antigua para los costarricenses”, dijo.
En la reconstrucción se invirtieron $70.000 ( ¢30,8 millones ).