San Carlos y Poás. Las preferencias políticas de los votantes de San Carlos y de Poás, ambos cantones de Alajuela, son los que retrataron más de cerca la decisión del resto de los costarricenses.
Estos resultaron ser los llamados cantones espejo de la elección del 2 de febrero, según la revisión que hizo este medio a partir de los resultados del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE).
A nivel nacional, Luis Guillermo Solís Rivera, candidato del Partido Acción Ciudadana (PAC), obtuvo el 30,64% de los votos, y Johnny Araya Monge, de Liberación Nacional (PLN), el 29,59%.
Ambos se verán en una segunda ronda el 6 de abril, pues ninguno alcanzó el 40% de votos válidos necesario para ganar la Presidencia.
José María Villalta, del Frente Amplio (FA), obtuvo 17,25% del apoyo; el Movimiento Libertario (ML) consiguió el 11,34%, y la Unidad Social Cristiana (PUSC), el 6,02% de los sufragios.
Estas cifras son bastante cercanas a las obtenidas en las 227 mesas abiertas en los 13 distritos de San Carlos, donde estaban empadronados 97.702 electores.
En este cantón de la zona norte, dedicado a la agricultura y el turismo, el PAC tuvo un 29,68% de los votos y el el PLN un 29,18%.
Un poco más alejado del resultado nacional quedó Frente Amplio con 14,89%. En cambio, el Movimiento Libertario y el PUSC estuvieron muy cercanos con 11,98% y 5,78%, respectivamente.
Entre tanto, las cifras de abstencionismo estuvieron ligeramente menores. El resultado nacional fue de 31,81%, mientras que en San Carlos fue de 29,68%.
Otro fenómeno que ocurrió a nivel nacional y se repitió en San Carlos fue el triunfo de PAC en la zona urbana y del PLN en la rural.
Ciudad Quesada, cabecera del cantón, la ganó el PAC, mientras que Cutris y Pocosol fueron para Liberación Nacional.
“EL PAC ganó ese distrito urbano, históricamente dominado por Liberación, por abrumadora mayoría. La explicación que le encuentro es que su población está más y mejor informada”, manifestó Néstor Gamboa, dirigente del PAC.
Para Alfredo Córdoba, alcalde sancarleño y dirigente liberacionista, el rompimiento del bipartidismo también cambió la realidad electoral de este cantón, que ahora es impredecible.
A juicio de Edgardo Araya, diputado electo por Frente Amplio y oriundo de esta zona, en materia socieconómica, San Carlos también es un reflejo de lo del país.
“Nuestro cantón tiene una clase urbana muy fuerte pero al mismo tiempo una rural muy abandonada. Es como un mapa pequeñito de Costa Rica”, exteriorizó.
Menor abstencionismo. Considerablemente más pequeño que San Carlos, Poás también estuvo muy cerca del resultado nacional.
Luis Guillermo Solís, del PAC, obtuvo el 31,85% de la votación, mientras que Johnny Araya, del PLN, un 30,52%. Los otros tres partidos de mayor caudal electoral obtuvieron porcentajes levemente inferiores al resultado nacional.
Es el caso de Frente Amplio un 15,71%, Movimiento Libertario 13,28% y el PUSC 3,79%.
La cifra que sí fue significativamente menor que la nacional fue la de abstencionismo con un 24,13%, según los datos del Tribunal.
“Es importante votar, porque yo tengo el deber de elegir; si no, no puedo alegar cuando las cosas no estén bien”, afirmó Yerlin Quesada, una estudiante de hotelería de 22 años que votó por primera vez el domingo 2 de febrero.
También Juan Sánchez, un transportista agrícola de 59 años, cree que ir a votar es muy importante para los poaseños, tanto como la religión. Por eso, dice que volverá a las urnas aunque su candidato, Rodolfo Piza, quedó fuera de la segunda ronda.
El octavo cantón alajuelense tiene un padrón de 19.747 electores, para quienes se abrieron 41 juntas en sus cinco distritos.