Contrario a lo que dice Ileana Balmaceda, los líderes sindicales alegan que la huelga apenas comienza. Para ellos, los datos de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) son un intento de minimizar el éxito del movimiento.
Es una irresponsabilidad. Buena parte de la consulta externa del país fue muy afectada. En la Clínica Solón Núñez (Hatillo), por ejemplo, únicamente se estaban atendiendo urgencias. Venir a decir que fue un 10% es una falta de respeto.
Difícilmente vamos a sacarlos a una manifestación. Eso lo tenemos claro porque no están acostumbrados a protestar de esta manera. En la caravana programada para el jueves pensamos que sí podrían salir a desfilar en vehículos.
Es apenas un inicio. En la CCSS ha habido huelgas de hasta 20 días. Creemos que entre más días, más afectados salen los usuarios y alguna salida tiene que haber para que se negocie.
No, no. La idea de hoy (ayer) tampoco era obligar al Gobierno a negociar, sino de manifestarnos públicamente, de que no nos quedáramos encerrados.
En Costa Rica hay una clara división de pensamiento. Creemos que hay un 50% de apoyo en este tipo de cosas, unos a favor y otros en contra. El cierre de las calles es para caminar, para que la opinión pública vea lo que estamos haciendo. Ya salieron comunicados de otros sectores populares que están dispuestos a participar.
Aquí es donde nosotros creemos que otros sectores sociales tienen que entrar a facilitar el proceso. Debe haber un gran debate y este no debe quedarse entre sindicatos y Gobierno.