Fue una protesta de 42 días la que originó, en 1982, la Ley N.º 6836 de Incentivos a los Profesionales en Ciencias Médicas, cuya interpretación se encuentra en debate.
Se trató de una huelga nacional por parte del Cuerpo Médico, impulsada para crear una nueva ley que les fijara garantías.
Alexis Castillo, expresidente del Colegio de Médicos, explicó que el objetivo fue que se establecieran ciertos montos porcentuales para asegurar que los profesionales, en el futuro, no “tuvieran que pelear por aumentos salariales todo el tiempo”.
De hecho, desde entonces el Cuerpo Médico no ha convocado a más huelgas por ese motivo.
Las dos cabezas al frente del movimiento de 42 días fueron los sindicatos de la Unión Médica y Siprocimeca. Castillo, quien entonces era dirigente sindical de la zona sur, calcula que en la huelga participaron unos 3.000 o 4.000 profesionales, incluidos psicólogos, microbiólogos y farmacéuticos.
“Lo recuerdo como un momento político muy difícil. Apenas se iniciaba el gobierno de Luis Alberto Monge y él entró casi que a resolver la huelga”, dijo el exdirigente.
En esos días, los médicos dejaron de percibir salarios. Sin embargo, en ese periodo sí se cubrieron los servicios de emergencias.
De hecho, lo que ocasionó el fin de la huelga fue una medida extrema, una que lo definió todo: el cierre de los servicios de emergencias del Hospital San Juan de Dios. Al día siguiente se terminó la huelga y se firmó la ley de incentivos médicos que dio “estabilidad laboral” y “tranquilidad” al gremio.
“Nunca se ha visto una huelga igual. Todos quedamos traumatizados, tanto médicos como pacientes”, recordó Alexis Castillo.