Costa Rica necesita hacer más cambios tendientes a asegurar los mismos derechos a la mujer que al hombre.
Esta es la opinión del 67% de los costarricenses consultados en una encuesta de opinión pública realizada por la empresa Unimer para La Nación. El cuestionario se aplicó, entre el 7 y el 14 setiembre, a 1.200 personas en todo el territorio nacional.
Lo anterior, a pesar de que al ser consultados sobre quién vive mejor en el país, el hombre o la mujer, el 69% de las personas aseguró que no hay diferencia.
Para la presidenta ejecutiva del Instituto Nacional de la Mujer (Inamu), Maureen Clarke, la leyes nacionales han avanzado mucho en beneficio de las mujeres.
“Creo que el marco normativo ha ido evolucionando hacia una mayor protección. Hemos avanzado mucho, pero no podemos decir que ya alcanzamos la meta”, dijo Clarke.
Sin embargo, aseguró que aún existen grandes diferencias que perjudican más a ellas.
“La realidad nos dice que no es cierto que vivimos igual, esa es la diferencia entre el deber ser y la realidad. La prueba está en los niveles de violencia que tenemos en contra de las mujeres y que se dan primordialmente dentro del hogar”, aseveró Clarke.
La socióloga especialista en género Montserrat Sagot consideró que Costa Rica ha avanzado en los derechos en los cuales se reconoce formalmente la igualdad de las mujeres, pero poco se ha logrado en los derechos de redistribución, que replantean las cargas; por ejemplo, la relacionada con el trabajo doméstico.
Añadió: “Por eso, se ha avanzado bastante en el terreno de la igualdad formal, y eso es positivo, pero las consecuencias de esos cambios formales todavía no se ven en todos los terrenos de la vida cotidiana. Es más fácil cambiar leyes que prácticas sociales y la distribución del poder”.