Los usuarios de telefonía celular deberán esperar al menos un año, hasta finales del 2012, para poder cambiar de operador y conservar el número de teléfono (portabilidad numérica).
Por ejemplo, abonados del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) podrían pasarse a Claro o Movistar sin necesidad de modificar el número de teléfono.
Aunque se prevé que las nuevas compañías empiecen a dar servicio en las próximas semanas, no ocurrirá lo mismo con la portabilidad numérica.
Maryleana Méndez, presidenta del Consejo de la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel), reconoció que el proceso para implementar este mecanismo tardará un año más.
La Sutel ya escogió el modelo que adoptará el país y se denominará “ Consulta para todas las llamadas”. Se dispondrá de una base de datos centralizada donde estarán los números, el nombre de los usuarios a quienes pertenecen y el operador del servicio.
Esa base la administrará una entidad de referencia – generalmente una firma privada–, a la cual se le contratará el servicio.
A ese centro, que funcionará como una intersección, llegarán todas las llamadas y de ahí se redireccionarán al respectivo operador .
Entre las tareas pendientes está definir un cronograma para implementar la portabilidad.
Además, falta determinar el costo del servicio, cómo se financiará y quién lo asumirá.
Méndez explicó que se están analizando diversos escenarios. El costo del servicio se definirá por la estimación de la demanda y el financiamiento podría cargársele al cliente interesado, a la empresa receptora o a todos los usuarios, con lo cual ese rubro se incorporaría a las tarifas.
En Chile, donde el servicio está para ser implementado a principios del año entrante, el costo para el cliente es de $0,75 por concepto de portabilidad.
También se deben establecer aspectos regulatorios como el tiempo máximo que puede pasar un usuario sin servicio mientras se traslada de un operador a otro.
Este tiempo puede ir de los 30 minutos hasta las 24 horas.
La Sutel está en proceso de contratar una empresa consultora que le ayude a definir estos aspectos.
Para Méndez, Costa Rica fue muy visionaria al incluir este aspecto en la ley, algo que no ocurre en la mayor parte de Latinoamérica. En países como Chile o Colombia, donde la apertura se dio hace mucho tiempo, hasta ahora se está implementando la portabilidad.
La funcionaria descartó que la ausencia de esta facilidad sea un tropiezo para la apertura móvil.
Según dijo, era casi imposible exigirle a los nuevos operadores dar esa facilidad cuando apenas están desarrollando sus redes.
En criterio de Víctor García, encargado de Regulación de Claro, la portabilidad aumenta las opciones de elegir para el consumidor que ya no topa con la barrera de salida de tener que dejar su número. “A los operadores nos obliga a ser más eficientes en el servicio”, agregó.
Matías Señorán, gerente de Comunicación de Movistar (Telefónica), opinó que “sería ideal” que dada la apertura y el ingreso de nuevos operadores, los clientes que desearan cambiarse de operador pudieran mantener su número.