Grupos sindicales anunciaron ayer las primeras protestas contra el aumento salarial de ¢5.000 para el sector público, anunciado el viernes por el Gobierno.
La primera manifestación, convocada por el Sindicato de Trabajadores de la Educación Costarricense (SEC), está programada para el 19 de enero, a las 10 a. m., frente a la Casa Presidencial.
Posteriormente, se realizará un piquete frente al Ministerio de Trabajo y Seguridad Social el miércoles 25 de enero, a las 2 p. m.
Esta última medida de presión se definió el lunes durante una asamblea general en la cual participaron los gremios representados en la comisión negociadora de salarios del sector público.
Alexánder Ovares, presidente de la Asociación Nacional de Educadores (ANDE), dijo que los trabajadores reclamarán la poca apertura del Estado para negociar.
“Hay un buen apoyo del sector sindical. La idea es unir a la mayoría de grupos para que el Gobierno entienda que no puede seguir imponiendo alzas de forma unilateral”, expresó Ovares.
Por su parte, la ministra de Trabajo, Sandra Piszk, pidió “más reflexión” por parte de los representantes de los líderes gremiales.
“Todos sabemos lo que al país le cuesta este ajuste salarial, que es más beneficioso para quienes ganan menos. Además, los ¢5.000 se potencian en un 60% al considerar los pluses salariales, por lo que decir que solo son ¢5.000 no es verdad”, sostuvo Piszk.
La decisión se tomó tras dos intentos fallidos de negociar el tema, pues los empleados públicos se negaron a hablar del incremento salarial sin antes aclarar cuáles son las potestades de la comisión negociadora de salarios.
Los sindicalistas convocaron a otra asamblea el 30 de enero, en caso de no recibir una respuesta satisfactoria del Gobierno.
Mientras tanto, publicarán campos pagados en medios de comunicación y someterán a un análisis legal la respuesta que recibieron del Gobierno sobre las potestades de la comisión .