Una ofensiva conjunta de la Policía de Tránsito y la Fuerza Pública golpeó este jueves a decenas de conductores imprudentes que hacen piques ilegales en la carretera Florencio del Castillo, hacia Cartago.
En ocho horas (de las 8 p. m. a las 4 a. m.) los oficiales levantaron 141 multas de tránsito y decomisaron 17 motos, un vehículo liviano y 15 pares de placas.
La información fue confirmada a La Nación por Diego Herrera, director de la Policía de Tránsito.
El operativo se realizó en la vía que va desde Pasoca (en San Juan de La Unión), hasta Hacienda Vieja, en Curridabat.
Las motos detenidas carecían de papeles de propiedad, no tenían derecho de circulación o revisión técnica y circulaban sin las luces o sin placas.
Del vehículo tampoco aparecieron documentos de propiedad, mientras que los 15 pares de placas retenidos corresponden a los autos de conductores que incumplieron el pago de derechos de circulación o revisión técnica, así como por exceso de ruido.
Estas infracciones tienen sanciones de ¢270.000, ¢180.000 y ¢144.000, respectivamente.
No obstante, no hubo castigos por piques, donde conlleva pena de cárcel de 1 a 3 años.
Vendrán más. Esta no es la primera vez que se organizan operativos conjuntos entre el Tránsito y la Fuerza Pública; sin embargo, no se han realizado con suficiente frecuencia porque el Tránsito ha estado ocupado en marchas y bloqueos, dijo Herrera.
Este jueves, el operativo contó con 100 efectivos de la Fuerza Pública y Policía de Migración, además de 30 oficiales del Tránsito.
“El éxito del operativo es que ni siquiera mis compañeros tenían conocimiento de hacia dónde se dirigían. Terminaron una asignación al final del día y luego les dije: ‘¡Acompáñenme!’. Así evitamos que se fugue información”, relató Diego Herrera.
En esas ocho horas, la Fuerza Pública también “pasó a investigación” a 13 personas, según el informe del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT).
Estas requisas también permiten encontrar armas, drogas y abrir expedientes a personas en condición migratoria irregular.
Herrera prometió que este tipo de operativos se seguirán repitiendo, organizados de manera secreta, para evitar alertar a los picones.
Aparte de seguir en la carretera Florencio del Castillo, los controles se realizarán en la vía a Guápiles, especialmente en el tramo entre el periódico La República y San Luis de Santo Domingo de Heredia.