La decisión de los costarricenses de tener menos hijos, o de no procrear, provoca que no haya necesidad de abrir nuevas escuelas para el curso lectivo que se inicia hoy.
Aunque en años escolares anteriores se daba la apertura hasta de diez centros de primaria, esta vez no aparece ningún nombre nuevo en la lista de escuelas del Ministerio de Educación Pública (MEP).
El descenso de la natalidad se aceleró en el 2002, cuando hubo 6.000 nacimientos menos en comparación con el año anterior.
Los niños nacidos en ese año están hoy en segundo o tercer grado, según el mes de nacimiento.
Como ejemplo, en 1990 la tasa de natalidad era de 3,2 hijos por mujer, pero ahora apenas es de 1,9 y sigue con tendencia a la baja.
La matrícula inicial estimada por el MEP para todos los niveles y modalidades de educación formal (escuelas y colegios, tanto diurnos como nocturnos) también refleja la disminución de nacimientos.
Está previsto que hoy ingresen a clases 964.000 estudiantes; es decir, 10.000 menos en comparación con el curso lectivo del 2009.
Una situación diferente ocurre en la secundaria, que todavía no ha sido alcanzada por esa ola de menos nacimientos (le llegará dentro de tres o cuatro años).
Por ese motivo, este curso tiene cuatro liceos nuevos y otros dos centros integrados de la educación para jóvenes y adultos (Cindea). En total hay 5.170 escuelas y liceos.
Los colegios nuevos son el de Pacuare y el de Florida en Limón.
El MEP también abrió el Colegio Técnico Profesional de San Pedro de Barva de Heredia y el Liceo Rural de Yimba Caj en Rey Curré, en Buenos Aires de Puntarenas.
Entre tanto, los dos Cindea son La Bomba y Herediana, en Limón.
Según dijo Leonardo Garnier, ministro de Educación, en secundaria hay una particularidad adicional: mientras que el 100% de los niños asiste a la escuela, solo el 82,7% de los jóvenes de entre 13 y 17 años va al colegio.
Una persona que esté en ese rango de edad, debería estar matriculado en una institución educativa.
Esto significa que el Ministerio necesita nuevos liceos o ampliar los actuales, si se propone atraer a más estudiantes.
“Tenemos el reto de ampliar la cobertura”, reconoció Garnier.
“Introducimos el pensamiento lógico en Español de secundaria, pero tenemos el reto de consolidar la capacitación de los docentes para que la lógica se use de una forma generalizada.
“También llevamos el proceso de transformación de la educación técnica, y ahora se incluyen carreras que se imparten en inglés”, apuntó Garnier.
Otras reformas impulsadas por el MEP tienen que ver con la enseñanza de Matemática, la educación sexual y la lectoescritura.