Anaya fue invitado al país para asesorar sobre el proceso de consulta requerido ante la pretensión de utilizar tierras indígenas para la construcción del proyecto hidroeléctrico El Diquís, en la zona sur del país.
De acuerdo con un comunicado enviado esta mañana por la Mesa Nacional Indígena, la reunión se prolongó por tres horas, durante las cuales expusieron a Anaya y otros personeros de la Organización de Naciones Unidas (ONU) las “violaciones” de las que son víctimas.
“En el encuentro los indígenas denunciaron la permanente inacción del estado costarricense para respetar, implementar y hacer cumplir las leyes nacionales, los convenios y declaraciones que ha sancionado en materia de derechos humanos y de lo pueblos indígenas”, añadió el documento.
Específicamente, señalaron la invasión a sus territorios y la negativa de la Asamblea Legislativa de aprobar una nueva de una nueva normativa indígena, así como la “campaña” en su contra en torno al proyecto El Diquís.
Los indígenas además, argumentaron la urgencia de que el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) entregue toda la información del proyecto para que ellos lo analicen, antes de tomar una decisión.
Ante sus reclamos, el Relator manifestó que “su función es escuchar, promover el diálogo y buscar una solución”, informó la Mesa Indígena.
Anaya viajará mañana a Buenos Aires de Puntarenas donde se ubica la sede del proyecto hidroeléctrico. También se reunirá con representantes de instituciones públicas, universidades y diputados.
Finalmente, dará al Gobierno sus observaciones, aunque el informe final lo entregará en setiembre.