Imprevistos de última hora en la agenda de la presidenta Laura Chinchilla aplazaron el anuncio sobre el Plan Nacional de Banda Ancha, programado para anoche.
La gobernante canceló su asistencia a la inauguración de la tercera edición de la feria Expo-Telecom, en el Hotel Real Intercontinental, en Guachipelín, Escazú.
En su lugar, acudió el segundo vicepresidente, Luis Liberman, quien informó a los empresarios y representantes del sector de que Chinchilla visitará la feria entre hoy y mañana.
La directora de prensa de la Casa Presidencial, Emma Lizano, dijo que la agenda de la presidenta se había complicado como consecuencia del conflicto con los arroceros y temas parlamentarios.
Los productores de arroz piden al Gobierno limitar las importaciones del grano para facilitar la compra de toda la cosecha local.
Las negociaciones con los arroceros empezaron el martes y continuaron ayer en la Casa Presidencial, y las ha liderado la ministra de de Agricultura y Ganadería (MAG), Gloria Abraham.
Por su parte, Hannia Vega, viceministra de Telecomunicaciones del Minaet, indicó que el plan nacional de banda ancha lo dará a conocer ella mañana, siempre en el marco de la Expo-telecom.
“Como la presidenta no pudo asistir, se suspendió el anuncio”, dijo Vega, sin dar detalles.
Al evento estaban convocados los representantes en el país de las principales empresas de telecomunicaciones, incluyendo a Claro y Movistar, los dos operadores celulares que están a punto de empezar su operación comercial.
Banda ancha es la capacidad de conexión y la velocidad del tráfico de datos.
El Plan incluye las inversiones en infraestructura, así como la disposición de contenidos y servicios en línea relacionados con salud, educación y finanzas, por ejemplo.
Según la viceministra, si la penetración de banda ancha pasa del 6,2% actual a un 10% en el 2015, esta contribuiría en $20 millones al crecimiento del producto interno bruto (PIB). “Si logramos avanzar hasta la segunda meta del 16% en el 2017, el crecimiento del PIB llegaría a $60 de millones”.