La junta directiva del Instituto Nacional de Seguros (INS) aprobó en abril un incentivo salarial por logros para sus jerarcas, que actualmente solo beneficia a su presidente ejecutivo, Guillermo Constenla.
El bono económico cubre a Constenla; al gerente general, José Ángel Villalobos Villalobos; y a los dos subgerentes Francisco Soto Soto y Guillermo Vargas Roldán.
El incentivo se calcula con base en el 0,1% de las utilidades técnicas obtenidas por la aseguradora y se paga mensualmente.
Constenla devengaba hasta diciembre anterior ¢4,8 millones como salario bruto. No fue posible determinar a cuánto ascendió su salario bruto en abril pasado –ya con el incentivo– pues el INS solo suministró la cifra neta: ¢5 millones.
En el caso del presidente ejecutivo, se acordó que el monto del salario neto más el incentivo no puede superar los ¢6,3 millones al mes.
Lo anterior se debe a que el monto del incentivo no podrá superar en más de un 15% el salario del gerente general, según consta en una carta enviada por Villalobos a los trabajadores, el 8 de junio pasado.
Ese monto, sin embargo, sigue por debajo del sueldo bruto del mismo gerente que hoy gana ¢6,9 millones; o de gerentes de entidades bancarias cuyos ingresos oscilan entre ¢9,8 millones (Banco Popular) y ¢12,7 millones (Banco de Costa Rica), según datos a marzo de 2010.
Al gerente y subgerentes aún no se les aplica el incentivo, porque estos tres jerarcas recibieron un ajuste salarial hasta de un 60% en marzo del año pasado.
En aquel entonces, el salario del gerente subió de ¢4,2 millones a ¢6,7 millones y el de los subgerentes aumentó de ¢3,8 millones a ¢5,6 millones, cada uno.
“En el caso de la gerencia y subgerencias, la junta directiva determinará si es necesario concretar dicho componente (el nuevo incentivo), dado que con el aumento del año pasado el salario está un poco más cercano, aunque entiendo que por debajo de lo que se gana en esas posiciones en las otras empresas estatales”, alegó Villalobos.
Anoche, a las 7:30 p. m. , se abordó a Guillermo Constenla a la salida de la sesión de junta directiva, pero se negó a dar declaraciones. Alegó que el cuestionario que este medio le remitió por correo electrónico desde las 3:23 p. m. ya había sido respondido por su gerente.
El acta de junta 9.054, del 12 de abril, sostiene que ese estímulo forma parte de una Política Salarial de Componente Variable por Logros, Objetivos o Resultados del INS.
Sin embargo, el mismo acuerdo indica que para el personal ubicado por debajo de las subgerencias es necesario que se haga una propuesta conjunta de la gerencia y la presidencia ejecutiva.
El acuerdo no dice cuándo se presentará esa propuesta, cuál será la base de cálculo ni a cuántos trabajadores cubrirá.
El incentivo que cubre a los dos subgerentes, el gerente y el presidente ejecutivo fue sometido a consideración de la junta por Constenla, quien no participó de la sesión cuando se discutió el tema ni cuando se aprobó.
El único voto en contra lo emitió el directivo Henry Ramírez, quien alegó que la propuesta se presentó en forma “atropellada” y en momentos en que la presidenta Laura Chinchilla emitió una directriz para solicitar racionalidad en el gasto público.
“No podría en este momento tomar una decisión en donde vayamos a comprometer el gasto de una forma mayor de parte del INS. Por tales razones, mi voto es negativo”, aseveró Ramírez.
El segundo intento lo frustró la Contraloría General de la República, en diciembre anterior, cuando denegó un bono exclusivo para Constenla, que le permitiera subirse el salario hasta un 69%.
Ahora, el incentivo se incluyó en una política salarial para los trabajadores del INS y la Contraloría no puede pronunciarse sobre ajustes salariales de la entidad.
A principios de este mes, la Unión del Personal del Instituto Nacional de Seguros (Upins) pidió a la junta directiva del INS anular el acuerdo y denunció el caso ante el Consejo de Gobierno, la Contraloría y la Procuraduría de la Ética.
Freddy Sandí, secretario gremial, alega que esa política salarial no cubre a todos los trabajadores de la institución y solo se utiliza “de mampara” para beneficiar a cuatro jerarcas.