ICE alerta por baja en lluvias y aumento en generación térmica

Mientras la gente disfruta de las tardes de verano y brisa fresca en pleno invierno, en el ICE se encienden las luces de emergencia.

La baja en las lluvias está afectando la producción de electricidad en las represas y ha obligado al ICE a quemar más combustibles de lo previsto para satisfacer la demanda eléctrica nacional.

De enero a junio, el Instituto ha invertido poco más de ¢40.000 millones en compras de diésel y búnker para generación eléctrica.

Esa cifra duplica el monto para compras de combustibles otorgado por la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) para todo este año.

Por lo tanto, este mayor gasto en hidrocarburos implicará un incremento futuro en las tarifas del servicio eléctrico que pagan los usuarios, aunque aún se desconoce en qué porcentaje.

Tal alerta la lanzó ayer el presidente ejecutivo del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), Teófilo de la Torre, en medio de un foro empresarial sobre el futuro eléctrico costarricense.

La actividad, realizada en el Hotel Aurola Holiday Inn, fue organizada por la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (Uccaep).

De momento, los datos de generación y gasto en combustibles entre enero y mayo de este año no superan a los registrados en el mismo lapso del 2011.

En los primeros cinco meses del 2011 el ICE gastó ¢59.505 millones en carburantes y en el mismo periodo de este año ese gasto es de ¢33.048 millones.

Este 3 de julio entró a regir un ajuste de 7,9% en las tarifas de generación y un 3,6% por distribución eléctrica para reconocer gastos en combustibles hechos por el ICE en el 2011. El alza regirá por un periodo de ocho meses.

El presidente de la Uccaep, Manuel H. Rodríguez, criticó el crecimiento en la generación térmica por el impacto en el medio ambiente y en la competitividad del sector empresarial.

“Actuar así no es ser congruente con el discurso internacional de buscar ser un país carbono neutral, pues mientras una institución del Estado invierte recursos para generar energía mediante el uso de combustibles, la empresa privada, y puedo aseverar que una serie de cooperativas agroindustriales, tiran energía limpia al océano”, manifestó el empresario.

Arenal a la baja. De la Torre también compartió con los empresarios su preocupación por la caída en el nivel de agua del embalse Arenal, el principal respaldo del país para proveer energía en los veranos. Usualmente, Arenal trabaja a toda capacidad los veranos, con lo cual baja el nivel de la represa.

Con las lluvias, a partir de junio comienza de nuevo con el llenado para llegar a fin de año con suficientes reservas y así enfrentar la época seca. Este año la situación varió.

“Estamos en un fenómeno hidrológico muy adverso (...). El ICE ha encontrado en sus propias plantas una merma en la generación. El nivel del embalse Arenal está más bajo de lo que se había proyectado y la generación térmica más alta de lo proyectado” agregó De la Torre.

Ese nivel es de 534,5 metros sobre el nivel del mar, medio metro por debajo del mínimo proyectado. Si esta situación no se revierte en los próximos meses, el panorama para el próximo verano sería mucho más complejo de lo previsto.

De acuerdo con el último pronóstico del Instituto Meteorológico Nacional dado a principios de mes, el fenómeno El Niño hará que llueva menos en el resto del año y hasta marzo próximo. Esa condición será más aguda en el Pacífico norte y el Valle Central.