Cartago. La “puerta santa”, sita al costado sureste de la Basílica de los Ángeles, se cerrará hoy y marcará el término del año santo jubilar mariano, concedido a los costarricenses por el papa Benedicto XVI.
Esta gracia papal, emitida el 18 de julio del año pasado, fue con motivo de la conmemoración de los 375 años del hallazgo de la imagen de la Virgen de los Ángeles, patrona de Costa Rica y conocida como La Negrita .
En aquella fecha, el obispo de Cartago, monseñor José Francisco Ulloa, golpeó tres veces la puerta, antes de abrirla, como lo manda la liturgia.
Según el rito católico, quienes la traspasen, se confiesen y comulguen reciben la indulgencia plenaria, que es el perdón total de los pecados, incluso aquellos denominados graves o mortales y que solo los obispos pueden dar la absolución.
El párroco rector de la Basílica, Jorge Eddy Solórzano, dijo que se escogió una puerta lateral angosta y no la frontal, que es más ancha, “para que sea un símbolo de que a Jesús no se llega fácilmente por puertas grandes y cómodas, sino por puertas angostas y humildes”.
Carlos Oreamuno, comunicador social de la diócesis de Cartago, aseveró que el papa Benedicto XVI ha seguido muy de cerca estas celebraciones “y ha dado muestra de deferencia hacia estas”.
Citó como ejemplos el rosario de oro que envió y la carta particular en la cual califica la imagen de “famosa”. Además, autorizó al cardenal mexicano Francisco Robles a impartir, en nombre de él, la bendición apostólica en el acto de conmemoración que se efectuará hoy.