Los directivos de instituciones públicas como el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) tienen libertad de apartarse de las recomendaciones técnicas a la hora de elegir contratistas.
Sin embargo, esta decisión debe basarse en otro criterio jurídico o técnico y los hace personalmente responsables de las consecuencias de la adjudicación.
Así lo explicó Luis Ortiz, experto en concesiones y derecho administrativo.
“En la Administración Pública para todo nombran una comisión. Eso es para diluir la responsabilidad”, aseguró Ortiz.
”Si eventualmente una empresa oferente demanda y el tribunal anula el acto , responden personalmente ellos, cosa que no ocurre cuando la decisión está basada en un criterio técnico”, agregó.
El director ejecutivo del Conavi, Carlos Acosta, dijo que en su institución “el 99% de las decisiones” se apegan a las recomendaciones de los técnicos, aunque estas no son vinculantes.
“ El hecho de que no sea la comisión (técnica) la que adjudica, sino un cuerpo colegiado, asegura que esa recomendación no sea absoluta, sino que sea definida por el máximo ente que tiene la competencia técnica y jurídica y los elementos de experiencia que le permiten, si fuera del caso, corregir algún error o deficiencia”, declaró Acosta.
A principios de mes, La Nación informó de que los directivos del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA) ignoraron los criterios de sus propios técnicos en la adjudicación de la megaplanta de tratamiento de aguas negras Los Tajos, que costará $40 millones.