Los universitarios que obtengan un préstamo de Conape tendrán que buscar dinero adicional para completar el pago de la carrera cada cuatrimestre, así como para comprar material didáctico.
La Comisión Nacional de Préstamos para Educación (Conape) restringió las condiciones de financiamiento debido al recorte que enfrenta desde hace tres años, cuando un cambio en la ley le disminuyó sus ingresos en ¢15.000 millones.
De esta forma, si el solicitante cursa alguna especialidad en Ingeniería o Ciencias Médicas, solo recibirá ¢1.221.000 al año.
Con ese dinero el alumno solo podrá cubrir entre el 70% y 80% del costo total de la carrera, estimó ayer Adrián Blanco, secretario ejecutivo de esa institución.
En caso de que el estudiante matricule en otra área, Conape le otorga un crédito hasta por ¢1 millón que, según la tarifa de la universidad, son suficientes para más del 90% del costo de la matrícula y las materias.
“Antes cubríamos el 100% y hasta se daba más por si necesitaban libros, viáticos u hospedaje, que eran casos que calificaban si la persona cambiaba de domicilio para ingresar a la universidad. Ahora nos centramos en el tema del costo del estudio”, aseguró Blanco.
“Del 9 de abril al 30 de mayo recibiremos solicitudes de quienes necesitan seguir sus estudios o van a empezar; en ese segundo período también califica gente para posgrados en el exterior”, dijo Blanco.
Por el recorte en los ingresos, este año Conape solo dará 3.200 préstamos; es decir, un 23% menos que los concedidos durante el 2011, cuando fueron aprobados 4.514.
El dato es más alarmante si se compara con el del 2010, cuando Conape asignó 8.067 financiamientos en condiciones favorables.
Lo atractivo de estos préstamos es que el beneficiario empieza a pagar cuando recibe el título.
Además, puede solicitar un período de gracia máximo de seis meses mientras consigue un empleo.
Otro beneficio es que la tasa de interés de estos créditos es del 8% variable, mientras en los bancos es del 14%, al menos.