La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) pidió a Costa Rica reactivar la fecundación in vitro –una técnica de reproducción humana asistida–, y dejar sin efecto el fallo de la Sala Constitucional que en el 2000 suspendió el procedimiento médico.
La exhortación de la CIDH, un órgano de la Organización de Estados Americanos (OEA) para defender y promover los derechos humanos, consideró que el pronunciamiento de la Sala “constituyó una interferencia arbitraria y una restricción incompatible con la Convención Americana de Derechos Humanos”.
Según el Informe N.°85/10 de la CIDH –del cual
El documento, que salió el 23 de agosto desde la sede la CIDH, en Washington, es la respuesta a una demanda que en el 2001 interpusieron diez parejas contra el Estado costarricense por el fallo de los magistrados.
La Comisión indica, además, que el país tiene dos meses –lapso que se cumple el 23 de octubre– para informar sobre las medidas que adoptará para “solucionar la situación denunciada”.
El escrito oficial fue remitido con carácter confidencial a René Castro, ministro de Relaciones Exteriores y Culto, y tiene como referencia
Gerardo Trejos Salas, abogado de 64 años y representante de las diez parejas, dijo que durante la década de espera nunca perdió la esperanza de conocer el fallo, pese a que estuvo cerca de fallecer.
Trejos criticó fuertemente el accionar de la Sala. “Lo que demuestra la Comisión es que la Sala IV, que se ha creído que es la única que tiene la verdad, no siempre la va a tener”, expresó el litigante.
Ayer se intentó conocer el criterio de los magistrados, pero la oficina de prensa del Poder Judicial señaló que el Informe de la CIDH está en manos de la presidenta de la Sala, Ana Virginia Calzada, y que solo ella se referirá al tema, pero se encuentra fuera del país.
Por otra parte, desde Nueva York, la presidenta de la República, Laura Chinchilla, dijo que desconocía el documento de la CIDH, pero dio criterio sobre el tema.
“Yo entendería que (el informe) prevalece sobre la decisión de nuestros tribunales y es muy probable que suponga que Costa Rica se tenga que mover a tramitar una legislación que regule toda la materia (de reproducción humana asistida)”, manifestó la mandataria.
Gerardo Escalante López, médico experto en fecundación in vitro y el primero en aplicarla en territorio nacional, hace 15 años, comentó que ahora el país deberá concentrarse en crear legislación para acatar lo que dice la CIDH.
Contrario a todos los anteriores opinó Mauricio Granados, vocero de la Conferencia Episcopal, para quien la fecundación in vitro “tiene una valoración moral negativa, porque la vida humana nunca es un medio, sino un fin”.
Antes del 2000, en Costa Rica nacieron 15 niños por fecundación in vitro, de los cuales todos viven.