En colegios como el Instituto de Guanacaste, el Liceo laboratorio y el Colegio Artístico Felipe Pérez, el apoyo fue masivo.
“Yo sí quise participar porque no es posible que nos sigan pisoteando nuestros derechos, que sería la nación sin educación y aún así siguen afectando a este sector”, dijo la profesora de Inglés del Colegio de Cañas Dulces, Berlín Aparicio, frente al gimnasio municipal de Liberia donde los dirigentes locales sede APSE convocaron a los educadores para explicar los cinco puntos del movimiento que apoyan: No aprobación de un plan fiscal B, aumentos salariales más justos, defensa de la seguridad social, no venta de los muelles de Limón, y un fuerte rechazo a la corrupción.
En otras instituciones el movimiento tuvo menos apoyo, pero igualmente algunos servicios se vieron afectados. En el Hospital Enrique Baltodano un grupo de alrededor de 40 personas permanecían en la mañana en el parque frontal, conversando, escuchando música y algunos jugando con un balón. Si bien, tras una espera de casi una hora, no fue posible que saliera un vocero, la guarda en el portón del parqueo, quien se dijo dirigente sindical pero que prefirió que no constara su nombre, indicó que entre los funcionarios en paro había algunos de Servicios Generales, Redes, Lavandería, Enfermería, etc, algunos de UNDECA, otros de SINTRASA.
En instituciones como el ICE y AyA, la municipalidad no hubo reportes de trabajadores en paro.
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