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El acelerador lineal que tiene el Hospital México no funciona desde mediados de setiembre. Autoridades del centro médico esperaban que estuviera listo a mediados de noviembre, pero no funcionará hasta febrero. Archivo
La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) paga por un servicio privado de acelerador lineal una suma que duplica el costo de tratar a los pacientes con cáncer en el Hospital México.
En la actualidad, la institución invierte hasta $1.600 por la atención de cada enfermo en sus instalaciones. Sin embargo, desembolsa $3.200 –el doble– a la clínica Radioterapia Irazú por el mismo tratamiento oncológico.
Dicho precio es considerado “excesivo” por dos oficinas de la CCSS (Gerencia Médica y Gerencia Financiera) y por la Contraloría General de la República.
La primera en llamar la atención sobre la diferencia de precios fue la Gerencia Financiera de la institución, en un estudio que hizo antes de que se firmara el contrato con la clínica.
La observación también fue hecha por la Contraloría en el oficio N° 01455, enviado a la Caja a inicios del año 2009. Precisamente, la CCSS solicitó la aprobación del ente contralor para poder pagar la diferencia.
La Contraloría dio el aval, pero volvió a señalar a la Caja la necesidad de que invierta en la compra de más aceleradores lineales (pues solo tiene dos)para evitar la dependencia que se tiene de los servicios de la clínica.
Rosa Climent, gerente médica de la entidad, explicó a este diario que debido a que Radioterapia Irazú es el único ente privado del país que presta servicio de acelerador lineal, el margen de negociación para fijar el nuevo contrato era mínimo.
Incluso, la clínica privada amenazó con salir del país si no le aceptaban el precio ofertado, afirmó Climent.
Se intentó obtener el criterio de la empresa sobre los señalamientos con respecto a sus tarifas, pero por tercera vez en dos semanas sus representantes declinaron de hablar con
El contrato entre la Caja y la clínica se inició el 24 de noviembre del 2009 y concluyó el 23 de este mes.
No obstante, debido a que el convenio establecía la posibilidad de prórroga por hasta cuatro años, desde hace siete días comenzó a regir la primera ampliación.
Según informaciones publicadas por este diario, en los últimos siete años la Caja pagó más de $10 millones a Radioterapia Irazú por servicios de acelerador lineal.
La dependencia de la Caja con esta empresa ha sido la falla constante de los aceleradores lineales del Hospital México.
“Sumando el gasto en que incurre la Caja, como el pago al personal médico e incluso considerando una utilidad para la institución (como si prestara servicios privados), se estimó que la entidad invierte entre $1.250 y $1.600 por paciente para el uso de acelerador lineal”, explicó Rodolfo Morera, asistente de la Gerencia Médica.
De acuerdo con Morera, antes de que se suscribiera el contrato con la clínica, también se analizaron otros escenarios con precios comparativos y se concluyó que el precio ofertado por Radioterapia Irazú era exagerado.
Uno de los escenarios analizados fue el de los precios históricos pagados por la Caja a esa empresa. Al comparar el contrato anterior y el actual, se determinó que la clínica hizo un aumento de $500 por paciente a la hora de concursar en la última licitación.
El segundo “escenario” fue valorar el precio ofertado de acuerdo con servicios similares en otros países, tomando en cuenta variables como inflación e impuestos.
“El precio de Radioterapia Irazú superó en promedio un 10% ($320) lo que se cobra fuera de Costa Rica”, aseveró Morera.
La oferta inicial de la clínica privada fue de $3.290 por paciente.
Tras pedirle a Radioterapia Irazú que reconsiderara su oferta, esta decidió que solo bajaría en $90 su precio inicial. Según Morera, el centro privado alegó que si bajaba más el precio le perjudicaría.
