Con el fin de garantizar el suministro futuro de agua en la capital, el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA) buscará $170 millones.
El proyecto, definido como la quinta etapa de ampliación del Acueducto Metropolitano, está enlistado entre las tareas pendientes de AyA, pero carece de un modelo de financiamiento.
El plan procura inyectarle a ese sistema 2,5 metros cúbicos de agua por segundo adicionales, con lo cual se estaría cubriendo un horizonte de demanda al año 2030.
Por ahora, el AyA ya le encargó al Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) el estudio de factibilidad de esa iniciativa. El análisis se realizará el año entrante.
Así lo informó ayer Yessenia Calderón, presidenta ejecutiva del AyA, durante la presentación de su informe de labores 2012.
Dicho sistema suministra el líquido a 1,1 millón de habitantes.
Un informe de la Contraloría General de la República, emitido a principios de este mes, puso en duda que el AyA pudiera garantizar el suministro futuro del líquido de manera sostenible.
“Esta es una de las fuentes futuras de abastecimiento, la cual se visualizó desde 1990 después del desarrollo de campos de pozos”, manifestó Calderón.
Tareas. La jerarca aseguró que otra de las metas de la entidad es disminuir el problema de agua no contabilizada mediante atención fugas y control a los comercios. Para ello se están destinando $125 millones.
El análisis hecho por la Contraloría determinó que AyA pierde el 50% de su agua. Esto provocó que entre el 2008 y el 2011 la entidad dejara de percibir ¢181.869 millones.
Otro de los frentes de trabajo es para atacar las conexiones ilegales al sistema de alcantarillado sanitario, donde se lograron detectar unos 800 servicios ilegales. Al poner al día a estos clientes, la entidad logró incrementar sus ingresos en unos ¢12,6 millones mensuales.
“Hemos logrado mejorar la capacidad operativa, pese a la limitación de recursos, pues las tarifas se aprobaron en setiembre y empezaron a reflejarse en octubre”, dijo la jerarca de la entidad responsable del suministro de agua.
Por otro lado, la funconaria reconoció que en la lista de asuntos pendientes de resolver este año está la sustitución de los equipos de bombeo para reducir el gasto en electricidad y ahorrar recursos.
Calderón no descartó que, durante el verano que se aproxima, deban aplicar racionamientos de agua en algunas comunidades ante un eventual faltante de líquido.