Una sociedad offshore panameña maneja capital de la Iglesia Católica de Costa Rica con ayuda de un operador bursátil representado en Costa Rica por el Grupo Empresarial Sama.
De acuerdo con documentos en poder de este diario, la empresa panameña Sarita Trading S. A. mantiene en sus cuentas inversiones bursátiles de la Conferencia Episcopal de Costa Rica, conformada por los ocho obispos que hay en el país.
Estas inversiones son administradas por la firma Servicios Bursátiles Internacionales (SBI), también panameña.
Sama Internacional, asesora financiera costarricense, es la representante de SBI en el país, según confirmó ayer Víctor Oconitrillo, presidente de Grupo Sama.
El sacerdote Guillermo Godínez Zúñiga, administrador de Servicios Pastorales de la Conferencia Episcopal, es la persona autorizada por los obispos para girar las instrucciones de los movimientos de dinero, según consta en los documentos de respaldo de una transferencia por $225.000 realizada en el 2006.
El 7 de febrero de ese año, el sacerdote Godínez le solicitó a Víctor Oconitrillo, de Inversiones Sama, que transfiriera $225.000 a una cuenta corriente que la Conferencia Episcopal (Cecor), Servicios Pastorales, tenía en el Banco Internacional de Costa Rica (Bicsa).
Al día siguiente se realizó una nota de débito en dólares, correspondiente al mismo monto, desde la cuenta de Sarita Trading, en Servicios Bursátiles Internacionales.
La nota de débito aclara que el traspaso de los fondos se realizó según carta 49-C (escrita por el sacerdote Godínez) y a favor de la cuenta número 102017935 de la Conferencia Episcopal en Bicsa.
Silencio. La Conferencia Episcopal mantiene total silencio en relación con sus operaciones financieras.
Ayer se intentó consultara monseñor José Francisco Ulloa, presidente de la Conferencia Episcopal, pero no respondió los mensajes dejados en su celular ni tampoco una solicitud de información realizada a través del sacerdote Glen Gómez, vocero de la Conferencia.
En una entrevista el viernes anterior, Ulloa dijo desconocer qué es Sarita Trading S. A.
Víctor Oconitrillo, de Grupo Sama, insistió en que no tiene autorización de su cliente (la Conferencia Episcopal) para referirse a las operaciones.
Oconitrillo también alegó que requería del permiso de su asesor legal, Alfonso Gutiérrez Cerdas.
Consultado ayer, Gutiérrez insistió en que, como abogado, tiene imposibilidad de discutir asuntos profesionales en la prensa. “Ni de este caso, ni de ninguno, yo no hablo con periodistas”.