Asesorados por Luigi Antonio Ardino, decenas de italianos adquirieron empresas costarricenses a nombre de las cuales compraron apartamentos, bodegas, parqueos y hasta edificios enteros en el Principado de Mónaco, en Europa.
Así se desprende de un estudio registral y de los protocolos de los miembros del bufete Gutiérrez, Hernández y Pauly --firma de abogados que utilizaba Ardino-- realizado por La Nación la semana pasada.
Ardino, quien se encuentra detenido en la Unidad de Admisión de San Sebastián desde el 24 de octubre, está acusado en su país por "asociación criminal", a raíz de supuestas evasiones al fisco italiano que se habrían cometido entre 1989 y 1990.
La operación en Costa Rica, de la cual se registran evidencias desde 1989, consistía en constituir gran cantidad de sociedades anónimas, en las cuales se consignaba como directores a los mismos miembros del bufete costarricense.
Posteriormente, los notarios --a nombre de las empresas-- otorgaban poderes a italianos residentes en Mónaco, algunos de ellos generalísimos (poder absoluto sobre el manejo de las firmas) y otros especiales, es decir, para la realización de un acto específico.
En todos los casos, los poderes especiales se gestionaron para que los italianos, a nombre de las compañías costarricenses, efectuaran compras de las más diversas propiedades en Mónaco por montos de hasta 2,3 millones de francos franceses (equivalentes a aproximadamente ¢89,5 millones al tipo de cambio actual) por cada apartamento.
De acuerdo con la información de la sección mercantil del Registro Público, el presidente que constituía las sociedades era Ernesto Gutiérrez Blanco, miembro del bufete Gutiérrez, Hernández y Pauly. Y las escrituras, en la mayoría de los casos, eran protocolizadas por el actual embajador alterno de Costa Rica ante las Naciones Unidas, José Manuel Gutiérrez Gutiérrez, también socio de la firma de abogados.
El viernes pasado, este diario envió un cuestionario a Ernesto Gutiérrez para que explicara el motivo de las operaciones. A las 6 p.m. de ese mismo día aseguró, por teléfono, que entregaría una respuesta en forma de "análisis jurídico". Sin embargo, una hora después envió un fax en el que expresó que, "por consejo legal y profesional", le es imposible referirse a las preguntas formuladas.
También se llamó por teléfono a Marina Burini, en Mónaco, una de las italianas que recibió los poderes, pero un hombre dijo que no quería saber ni hablar nada del asunto y colgó el teléfono.
"Seguían sus consejos"
Ante la negativa de Ernesto Gutiérrez, se hicieron las mismas consultas, vía telefónica, al embajador Gutiérrez, quien reside en Nueva York.
El diplomático, actualmente indagado por la Cancillería a raíz de su relación con Ardino, explicó que todos esos italianos residentes en Mónaco eran clientes de Ardino y que fue él quien los puso en contacto con el bufete costarricense.
"Ellos actuaban siguiendo sus consejos --los de Ardino--. Yo no sabría decirle para qué compraban propiedades en Mónaco por medio de sociedades costarricenses. Es algo que habría que preguntarle al profesor (Ardino), que los asesoraba", manifestó Gutiérrez.
Indicó, además, que "no era de interés del bufete" preguntarle a sus clientes sobre el uso que le daban a las sociedades que ellos constituían. "La relación con este señor --Ardino-- duró muchos años, precisamente porque ninguno se metía en el terreno del otro. Nosotros no éramos policías, ni agentes del fisco italiano o francés para averiguar qué hacían ellos con las sociedades", insistió.
Consultado por La Nación sobre el motivo de la operación, el abogado de Ardino, Gonzalo Castellón, explicó que la asesoría que brinda al italiano es estrictamente penal pues no ejerce otra disciplina jurídica. "Es muy poco o casi nada lo que conozco sobre el manejo de sus empresas", aseveró. Sin embargo, el profesional se comprometió a hacer la consulta a su cliente hoy.
Directores que no son
De acuerdo con la información vigente en el Registro Público, las sociedades utilizadas por los italianos aún mantienen a Ernesto Gutiérrez como miembro de la junta directiva, generalmente en el cargo de presidente, y a los demás miembros del bufete en los otros puestos.
Sin embargo, José Manuel Gutiérrez asegura que todas las firmas fueron "vendidas" a sus verdaderos dueños a quienes les entregaron los títulos, los cuatro libros de actas y "renuncias" de sus cargos como directores. "Hay recibos y contratos en los que se ceden las acciones", insistió.
Consultado sobre la razón por la cual no se cambiaron los miembros de las juntas directivas cuando las empresas fueron vendidas, el embajador respondió: "Me imagino que los clientes no querían."
Aunque advirtió que nunca le consultó a los clientes de Ardino sobre las razones para no aparecer nombrados, comentó: "Me imagino que algún beneficio económico tendrían al hacerlo así, pero no me consta."
Poderes al por mayor
Los siguientes poderes especiales son algunos de los que otorgó Ernesto Gutiérrez a italianos residentes en Mónaco, como presidente de las sociedades costarricenses. Todas las escrituras fueron protocolizadas por el embajador ante las Naciones Unidas, José Manuel Gutiérrez.
EMPRESA: MACARINA S.A.
FECHA: 15 de junio de 1989.
PODER ESPECIAL A: Luigi Antonio Ardino.
TRANSACCION: Adquirir, a nombre de la sociedad, el apartamento # 7, del edificio Le Mirabeau, ubicado en Mónaco. Vende madame N. Durafourg.
EMPRESA: EGEON S.A.
FECHA: 4 de enero de 1994.
PODER ESPECIAL A: Burini Andreé Frolla.
TRANSACCION: Adquirir de la señora Carla Pace de Cerutti un apartamento con bodega y estacionamiento en el conjunto inmobiliario Residencia Les Oliviers, en Monte Carlo, # 13, Boulevard du Jardin Exotique.
Fuente: sección de archivo notarial del Archivo Nacional..
EMPRESA: Insecosel S.A.
FECHA: 5 de marzo de 1990.
A FAVOR DE: Bergamini Manlio, agente de comercio residente en Le Grand Large, # 42, Quai des Sanbarbari, Mónaco.
TRANSACCION: Adquirir, a nombre de la sociedad, del señor Eckbo Stein, los locales N= 2814 y N= 813 de un inmueble denominado Le Grand Large, situado en el N°ree; 42, Avenue des Papalins, en Mónaco.
EMPRESA: Insecosel S.A.
FECHA: 11 de julio de 1990.
PODER ESPECIAL A: Bergamini Manlio.
TRANSACCION: Adquirir de la sociedad Diamela Group S.A. el lote N= 825 del inmueble denominado Le Grand Large.
EMPRESA: Aristelis S.A.
FECHA: 21 de febrero de 1990
PODER ESPECIAL A: Burini Andreé Frolla, pensionada, vecina del tres avenue Pasteur N= 98000, Mónaco.
TRANSACCION: Adquirir de la sociedad anónima de derecho suiza TRANS FIDUICIARE A.G. los locales N= 42, # 332 y N°ree; 170 del edificio El Botticelli, situado en el N°ree; 9 Avenue des Pepelins, en Mónaco.