Hay un frecuente reporte de pérdida de recetarios de psicotrópicos. ¿Qué conocimiento tienen del tema?
No es tan fácil (que usen los talonarios de la Caja en el sector privado) porque a los farmacéuticos les llamaría la atención. Es casi seguro, pero no quiere decir que no pase –que se utilicen esos recetarios extraviados–.
”Pero sí hay un control. Que puede ser un poco más laxo, podría ser, pero la Caja notifica cada vez que se pierden talonarios de psicotrópicos. Eso se comunica, quiere decir que en las farmacias de la institución no se van a recibir esos talonarios”.
¿Tienen conocimiento de casos en donde sí se usan talonarios que fueron robados?
Por lo general, las mismas farmacias comienzan a detectar. Nosotros tenemos denuncias tanto de la farmacia, como del médico, que alguien le está llegando muy a menudo. Sino, aquí (en el Ministerio de Salud) las funcionarias reciben las recetas y comienzan a detectar firmas que no son. Si se detecta alguna anormalidad, uno llama al médico y hace las consultas.
Precisamente esa es otra debilidad: los controles son a mano, no hay sistemas informáticos que permitan interconectar farmacias, a la Caja, al ministerio y los médicos que recetan.
Tenemos años de estar viendo algún tipo de sistema digital que nos facilite este control del recetario y de la prescripción en general. Estamos buscando alguna alternativa de una manera que nos permita detectar de manera más ágil, más rápida, detectar esto. Se está con un proyecto más formal con Gobierno Digital.